El Consejo descarta aplicar un ERE de extinción y busca otras soluciones
Busca otras vías después de que algunos empleados apoyen la reducción de jornada.
El presidente del Consejo Comarcal del Bierzo, Alfonso Arias, reconoció ayer que si bien no se ha producido todavía una reunión formal con los trabajadores que podrían verse afectados por una regulación de empleo, sí que hay contactos permanentes que llevan —dijo— la situación por buen camino, hasta el punto de que la entidad berciana prácticamente descarta ya la aplicación de un ERE de extinción que en un principio afectaría a 18 trabajadores. «Hay buena disposición tanto por parte de los trabajadores afectados como del equipo de gobierno. Es fácil que no tengamos que presentar un ERE, porque no vamos a llegar a los diez empleados que hacen falta como mínimo para hacerlo», explicó el presidente, adelantando que buena parte de los afectados han mostrado su conformidad con la reducción de jornada.
Y es que la prioridad del gobierno comarcal no es otra más que mantener el empleo. Algo que ha día de hoy se hace incompatible con la reducción del déficit que necesita llevar a cabo el Consejo para demostrar su viabilidad. Por ello, el presidente baraja todas aquellas opciones que permitan cumplir objetivos minimizando en la medida de lo posible el impacto en los recursos humanos. La reunión de negociación entre ambas partes se producirá, con toda probabilidad, el martes.
Precisamente oxigenar las arcas del Consejo y acabar con la deudad de más de 1,3 millones de euros es un paso previo obligatorio para fortalecer su estructura en el marco de la nueva ordenación territorial que promueve la Junta. La institución tiene ahora más posibilidades que nunca de alcanzar mayores competencias sobre todo de ayuntamientos, pero también de la Diputación provincial y de la propia Administración regional.