Tapones que contienen vida
Los estudiantes del Ponferrada XII entregaron 15.000 tapones de plástico a Seur para ayudar a niños enfermos .
Flor Martínez, ayer con las cajas de tapones en el colegio.
Con el fin de ayudar económicamente a niños que necesiten un tratamiento médico excepcional, los alumnos del colegio Ponferrada XII de Flores del Sil se sumaron ayer a la campaña solidaria promovida por la Fundación Seur, y que nació con el caso de una niña de Zaragoza, Aitana García, que ya logró el dinero necesario para una operación de cardiopatía congénita.
La asociación Arrabal de madres y padres de alumnos del colegio de Flores del Sil que preside Flor Martínez entregaba ayer con los niños al responsable del área comercial de Seur, Juan Antonio Basante, varias cajas con los 15.000 tapones de plástico que han conseguido reunir en los últimos tres meses.
El peso de este plástico para reciclar será convertido en dinero que finalmente entregarán a los niños con problemas médicos especiales. Por eso, aunque la campaña empezó con la pequeña Aitana, ahora la campaña se amplía y han decidido llamarla «Tapones para una nueva vida».
Tras la recogida de las cajas por parte del responsable de Seur, desde esta empresa de transporte urgente se hizo entrega de un lote de libros al director del colegio de Flores del Sil, Vicente Parra, como símbolo también de agradecimiento.
Un palé con cajas cada mes . En el acto público de ayer, el responsable comercial de Seur comentaba que desde que comenzó esta campaña ha sido un verdadero goteo de entrega de tapones para reciclar y cuenta que cada mes logran reunir más de un palé de cajas con tapones de plástico que serán convertidos en dinero. Han llegado a reunir 150 kilos. En total han superado ya con toda la campaña los 100 millones de tapones.
Además, esta campaña cuenta con una doble ventaja, según explicaban sus promotores. Por un lado se ayuda a financiar tratamientos médicos costosos para niños con enfermedades especiales, y por otro también se ayudar a reciclar y evitar emisiones contaminantes de CO2.
«Es una campaña muy bonita, es buena para los niños necesitados y es buena también para el medio ambiente, comentaba Vicente Parra, representante en el acto también de la Fundación Seur.
Los niños del colegio de Flores del Sil, que se han implicado de lleno en este proyecto junto con sus padres, también estamparon su firma en una especie de mural dedicado a esta causa, a la ayuda de los más pequeños con problemas médicos especiales.