La ampliación y la subida de la ORA en Ponferrada no encuentran freno político

La ampliación del territorio ORA en Ponferrada, que duplicará prácticamente las actuales plazas de aparcamiento restringido, no encontrará cortapisas políticas. Esa es la actitud plenaria que ayer adelantaron los grupos de la oposición, PSOE e IAP, durante el debate en comisión informativa de la propuesta del PP para la renovación de la concesión del servicio para los próximos diez años. Ambas formaciones se abstuvieron.

Las líneas maestras del nuevo contrato, que supondrá elevar de 1.300 a casi 2.300 las plazas de pago —en gran medida en la zona alta de la ciudad— y subir la fracción mínima de los 20 minutos de 0,20 a 0,25 céntimos de euro (un 25%) se mantendrán. Socialistas e independientes sólo consiguieron introducir modificaciones formales en las condiciones del contrato.

Por ejemplo que se potencie la oficina de movilidad para que los ciudadanos que tengan problemas con la ORA o deseen algún tipo de información la obtengan de modo mucho más directa. O de otra parte que a las empresas participantes en el concurso se les valore la introducción del sistema de pago, además de en metálico o con la tarjeta ciudadana, a través de la telefonía móvil.

Esperando el pleno

El concejal delegado del área, el popular Tino Morán, volvió a defender la conveniencia de ampliar la zona azul por razones de movilidad en áreas comerciales y también a instancias de vecinos de zonas residenciales donde la presión de tráfico se ha incrementado de forma notable en los últimos años. A su juicio, la postura de los grupos opositores en la comisión informativa no hace pensar en un giro inesperado en el Pleno que tendrá lugar el viernes. De hecho, en la comisión de Hacienda, también se produjo la abstención tanto del PSOE como de IAP en cuanto a las nuevas tarifas, que incluyen asimismo el repunte de 36,50 a 40 euros anuales en la tarjeta para residentes.

Si en la sesión plenaria no media un cambio de postura política, en cuestión de un mes se podría licitar el concurso y a principios de verano conocerse la nueva empresa concesionaria de la ORA, que desde hace diez años está en manos de la compañía Dornier.

El Ayuntamiento ponferradino espera ingresar por esta concesión un canon fijo de al menos 450.000 euros, además de otro anual que en relación con el porcentaje sobre ingresos de la concesionaria podría rondar los 60.000 euros. La zona más afectada por la ampliación de la ORA en la capital berciana será la alta. De manera muy especial las vías que se inscriben entre la calle Ancha y la avenida del Castillo. También en el centro de la se incorporarán espacios como el entorno del Edificio Minero o el puente García Ojeda desde la plaza Luis del Olmo hasta la calle Mercado Viejo.