El conejo de monte ataca de nuevo
Los conejos de monte vuelven a los viñedos del Bierzo —como ya lo hicieron el año pasado— y lo hacen de una manera temprana, cuando la vid está brotando. Un verdadero problema, dado que el roedor se come el brote impidiendo que la planta dé fruto y llegando incluso a poner en peligro la supervivencia de la vid. Según adelantó el presidente de Asaja en el Bierzo, Roberto Canedo, el problema es muy grave y afecta ya a parcelas de Pieros, Valtuille, Villadecanes o Toral de los Vados, entre otros. También desde el Consejo Regulador de la Denominación de Origen de los Vinos del Bierzo han confirmado la problemática, asegurando que ya ha sido puesta en conocimiento de la Junta de Castilla y León para que tome las medidas oportunas. Esas medidas serán las mismas que las del año pasado.
El jefe del Servicio Territorial de Medio Ambiente, Mariano Torre, ya le ha comunicado al presidente de la D.O, Alfonso Arias, que volverán a autorizarse batidas o cualquier otro método de control —como el uso de hurones— para limitar la población de este animal cinegético. Ahora, deben ser los cotos de caza o los propietarios a título particular —en el caso de que su viñedo no esté integrado en un coto— los que tienen que solicitar a la Junta las cacerías controladas. «Son las personas del coto quienes tienen los derechos cinegéticos, por tanto son ellos quienes tienen que pedirlo. Nosotros ya hemos adelantado que se va a hacer lo mismo que el año pasado y hasta donde sea necesario», apuntó Mariano Torre, garantizando que, si hiciera falta, se pondrán más medios que en la campaña anterior.
Las conversaciones entre Consejo Regulador y coto de caza de Cacabelos ya han comenzado, según confirmó el presidente de Asaja en el Bierzo. Y es que los cazadores son unos de los primeros interesados en que el problema no vaya más allá, ya que al tratarse de un animal cinegético, ello serían responsables de parte de los daños que los conejos provoquen en las vides.
Así las cosas, pese a que la superpoblación de estos roedores de monte parecía controlada después de las batidas llevadas a cabo el verano pasado —cuando se mataron alrededor de 300 animales por fin de semana— y a consecuencia la enfermedad que les atacó al hígado provocándoles la muerte, el problema vuelve a ser una realidad más preocupante, si cabe, que la vivida en los dos meses previos a la última campaña de recogida de uva del Bierzo.