La Junta no avala a Vitro y la empresa decide seguir adelante con el plan de cierre

Como un jarro de agua fría, como una bofetada en la cara recibieron ayer los 421 trabajadores de las dos factorías que Vitro Cristalglass tiene en el Bierzo el resultado de la reunión mantenida en Valladolid por el comité de empresa, la dirección de la multinacional mexicana del cristal y la Junta de Castilla y León. La Administración autonómica dejó bien claro y de manera rotunda en este encuentro que no avalará la operación de crédito de 10 millones de euros que cinco entidades bancarias estarían dispuestas a inyectar en Vitro. El argumento ofrecido por la Junta es que el plan de ajuste presupuestario en las autonomías, impuesto desde el Gobierno central para cumplir con el déficit público, le impide mover dinero para esta necesidad industrial.

De esta forma, al no recibir el aval de la Junta, los directivos de Vitro indicaron que no podrán hacer frente a la situación de las fábricas de La Rozada (Toral de los Vados) y Camponaraya. Y añadieron que, de hecho, los bancos con los que están negociando la concesión de los fondos siguen sin darle una respuesta positiva sobre el crédito solicitado sin ese aval público.

Ante la inexistencia del dinero, la dirección empresarial de Vitro puso de manifiesto que seguirán adelante con su plan de cierre. Es decir, sigue vigente el ERE de extinción para los 421 operarios de plantilla, y también a la vez el proceso concursal presentado en un Juzgado de lo Mercantil de Madrid.

Con este negro y pésimo panorama, el comité de empresa hizo en esta misma reunión de ayer tarde —celebrada en el denominado «Centro de soluciones empresariales de la Junta»— una petición a la dirección de Vitro. Los trabajadores quieren que la empresa retire el ERE de extinción y se quede como mal menor con el concurso de acreedores, dado que de seguir adelante con las dos propuestas los trabajadores se verían seriamente perjudicados en sus intereses económicos y laborales. Verían retrasado la percepción de las indemnizaciones y la posibilidad de engrosar las filas del paro cobrando el subsidio de desempleo. También les perjudicaría en no quedar «liberados» de esta empresa para acudir a otra, en caso de encontrar otro trabajo. Con el proceso concursal también se podrían abrir la posibilidad de que alguien comprase la empresa.

De esta forma, la representación de los trabajadores consiguió arrancar un compromiso de mínimos de los directivos de Vitro: El próximo lunes les darán una respuesta sobre si retiran o no el ERE de extinción. Dirección de empresa y representación laboral se reunirán de nuevo a partir de las 16.00 horas.

Con esta situación, la plantilla de Vitro intentará hoy jueves retomar en lo posible «la normalidad». Los trabajadores vuelven a las plantas tras el seguimiento masivo de la huelga en la pasad jornada.