La Junta rescindirá a la constructora que tras un año aún no comenzó Camino del Francés

Ponferrada parece no tener «suerte» con las obras de urbanización que la Junta de Castilla y León adjudicó en vísperas de los últimos comicios municipales. Los retrasos que acumulan o han acumulado las mejoras en grandes ejes como la avenida de Valdés o actualmente la avenida de Astorga —por la insolvencia de las constructoras— no son los únicos que padecen los ciudadanos de la capital berciana.

En el barrio de Cuatrovientos, uno de los más populosos de la ciudad, los vecinos de la zona conocida como el Camino del Francés ya tienen casi agotadas todas sus reservas de paciencia. Aunque al menos en breve podrían recibir buenas noticias oficiales sobre el porvenir de la urbanización de la primera fase de dicho espacio, que la empresa pública Provilsa, dependiente de la Junta de Castilla y León, adjudicó ya en mayo del año pasado.

Catorce meses después no es que las obras estén paralizadas o interrumpidas. La realidad es que las sociedades adjudicatarias, General de Construcciones y Obras y Arpo, ni siquiera han puesto los pies sobre el terreno. Tanto en medios municipales como vecinales se consideran «desaparecidas».

Después de todo ese tiempo, sin embargo, según acaban de trasladar al Ayuntamiento de Ponferrada los responsables de Provilsa, parece que se pondrá en marcha definitivamente el mecanismo administrativo para la rescisión del contrato.

A la baja

La licitación de la obra se produjo a principios del 2011 por algo más de 440.000 euros. Y la adjudicación final se produjo por 338.000 euros, una cifra nada despreciable en los tiempos que corren, pero que según algunas fuentes consultadas por este periódico es posible que la unión de empresas presentara con una baja excesiva para conseguir el trabajo y que ahora ve económicamente inasumible.

El Ayuntamiento, que se vio favorecido por la adjudicación del Ejecutivo regional, se ve presionado ya desde hace bastante tiempo por los residentes del Camino de Francés y también por la reivindicativa Asociación de Vecinos de Cuatrovientos.

Por eso, según corroboró ayer el propio alcalde, Carlos López Riesco, se espera que Provilsa cumpla con sus pretensiones de dar por zanjado el contrato y abrir cuanto antes el proceso para la readjudicación del Camino del Francés. Propietarios y vecinos de Cuatrovientos realizaron incluso un importante esfuerzo al ceder los terrenos particulares necesarios para afrontar la mejora del vial.

Trescientos metros

La primera fase de la intervención prevista debería abarcar al tramo comprendido entre las calles San Esteban y Valdés Leal. Se trata de un vial de 300 metros de longitud y un ancho de calle de doce metros. El proyecto diseñado por el Ayuntamiento de Ponferrada contemplaba la pavimentación de la calzada, nuevas aceras y renovación de infraestructuras y servicios básicos, así como la instalación de mobiliario urbano y arbolado ornamental.

El plazo contemplado para la culminación de todos los trabajos era de cinco meses. La triste realizad para los vecinos de Cuatrovientos y en particular de los residentes en el Camino del Francés es que ni siquiera se ha producido el pistoletazo de salida.