Un dominicano se expone a 10 años de cárcel por apuñalar 23 veces a su jefe
El juicio se celebrará en la Audiencia Provincial el próximo día 25 de septiembre.
La Sección Tercera de la Audiencia Provincial juzgará el próximo martes 25 de septiembre, a partir de las 10.00 horas a un individuo de origen dominicano sobre el que pesa la imputación de un delito de asesinato en grado de tentativa, por el que el Ministerio Fiscal propone una pena de diez años y medio de prisión y 25.000 euros de indemnización.
El acusado residía legalmente en Ponferrada y no tenía antecedentes penales el día en el que ocurrieron los hechos. Fue el 7 de junio de 2010, a las 10.15 horas de la mañana, cuando por el malestar con los dirigentes de la empresa para la que trabajaba, una compañía de transportes y obras perteneciente al Grupo Alonso, que se estaba ocupando de la urbanización de una factoría de neumáticos de gran tamaño, se dirigió a las oficinas de la firma para la que trabajaba, cuya sede se encuentra en el Polígono Industrial de Fabero del Bierzo.
De forma sorpresiva y súbita sacó del bolsillo una navaja que portaba y propinó 23 puñaladas a uno de los ingenieros «con ánimo de causarle la muerte». La víctima, un joven topógrafo de 24 años de edad en el momento de los hechos y residente en Cabañas Raras, se encontraba sentado en su mesa, hablando por teléfono y de espaldas al acusado. El encargado de los talleres de Uminsa, otra de las empresas del grupo Alonso, fue precisamente la persona que alertó de lo que estaba ocurriendo. Conversaba por teléfono con la víctima y al escuchar sus gritos pensó que se acababa de producir un accidente. El herido no tuvo oportunidad de defenderse en el transcurso del ataque en el que resultó atacado fundamentalmente en el cuello, brazo y hemitórax derecho, así como en los miembros inferiores. En el cuadro médico presentaba un traumatismo torácico penetrante, herida secundaria a herida penetrante, heridas incisas penetrante múltiples en cuello, brazo y antebrazo por la zona exterior, hemitórax derecho, miembro inferior derecho y miembro inferior izquierdo que le hubiesen causado la muerte de no haber sido intervenido médica y quirúrgicamente con la rapidez con la que se hizo. Después de que se le estabilizó en un primer momento en el centro de salud de Fabero, se procedió a su traslado en helicóptero al Complejo Asistencial Universitario de León, donde se repuso de sus lesiones.
El herido tardó en sanar de sus heridas 81 días, de los cuales cuatro estuvo hospitalizado y 77 impedido para realizar sus ocupaciones habituales. Como secuelas le quedó la limitación para la movilidad en una de las extremidades inferiores, valorada en un punto y diversas cicatrices en rodillas, espalda, cuello, tórax, brazo y axila así como en la zona pectoral, valoradas en 16 puntos que le causan un perjuicio estético medio.
Como consecuencia de lo ocurrido, la víctima sufrió también desperfectos varios en la ropa que portaba en el momento de los hechos, que se valoran en 46 euros y el Fiscal hace constar también que las labores de limpieza de la empresa que adecentó las instalaciones en las que ocurrió el presunto delito ascienden a 180 euros.
Asesinato en tentativa
La Fiscalía califica el delito de asesinato en grado de tentativa y propone una pena de diez años y seis meses de prisión. La calificación se rebaja de forma notable sobre los máximo previstos por la ley porque el procesado acudió al puesto de la Guardia Civil de Fabero, donde se reconoció autor de la agresión y mostró la navaja todavía ensangrentada, con la que presuntamente cometió el delito. Incluye una indemnización de 25.000 euros por las lesiones, de acuerdo al escrito de calificaciones provisionales que presenta el Ministerio Público.