Trabajadores de Uminsa entran escoltados a sus puestos de trabajo ante las críticas de los piquetes

Decenas de trabajadores de las minas de interior de Unión Minera del Norte (Uminsa) consiguieron hoy acceder a sus puestos de trabajo, aunque tuvieron que hacerlo escoltados por agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, ante las críticas y abucheos de los piquetes que se agolpaban en el exterior de las instalaciones mineras del Grupo Alonso.

Esta división entre los trabajadores de los cielos abiertos y de las minas de interior del Grupo Alonso ya se presagió en el día de ayer, cuando mineros del pozo Santa Cruz, en Santa Cruz del Sil, intentaron acceder a los tajos sin éxito por la presencia de piquetes, lo que provocó la denuncia para recibir la escolta necesaria que hoy ha permitido alcanzar ese fin.

Después de que el Grupo Alonso comunicara el expediente de despido en un plazo de 72 horas para los 17 miembros del comité de huelga, a los que se han sumado en las últimas horas otros 50, los trabajadores de los cielos abiertos se reunieron en asamblea en Ponferrada, donde se entendió esta medida como una forma «de presión» para la desconvocatoria del paro, pero la medida ha surtido «un efecto contrario» y se ha decidido mantener el paro «salvo que la empresa llegue a un acuerdo» y «mientras no se retiren esos despidos», explicó a Ical el secretario provincial de MCA-UGT, Manuel Luna.

Los trabajadores de Uminsa iniciaron el pasado 23 de agosto una huelga con carácter indefinido en protesta por la modificación de horarios impuesta por la empresa, que en el caso de los trabajadores de los cielos abiertos supone una reducción salarial de entre 200 y 400 euros.