Piden al presidente de la Fundación Valdés que dimita

La Asociación de Vecinos Casco Antiguo de Ponferrada no está dispuesta a dejar que se enfríe la polémica por la tala de árboles centenarios que se produjo el pasado día 10 en una de las sedes de la Fundación Valdés en la calle Jardines. Tras la denuncia de la plataforma vecinal, el presidente de la Fundación, el párroco José Antonio Arias, que administra el patrimonio del legado de Miguel Fustegueras Álvarez Valdés, justificó la corta por las quejas de un sector del vecindario sobre la falta de limpieza en dicho espacio urbano. Arias alegó además que se trataba de un recinto privado y atacó a los denunciantes, tachándolos como «ecologistas de salón».

La directiva de la Asociación Casco Antiguo reclamó ayer directamente al presidente de la Fundación Valdés que dimita. Consideran que ha mentido. En primer lugar, porque también minimizó la tala asegurando que no existía ninguna secuoya en el jardín ni especies de cierto valor. Los portavoces del colectivo vecinal sostienen que está documentado que se taló dicha secuoya y que se salvó otra hermana.

También desmintieron a Arias al asegurar que lo único que demandaron algunos vecinos de la zona histórica fue una mejor limpieza del jardín de la casona natal de Valdés, pero nunca la tala del arbolado. «Minimiza su acción al declarar que no se ha quitado nada de importancia—acusaron al administrador de la Fundación—pero no es cierto. Ha cometido un grave atentado ecológico sin ningún tipo de permiso». Bajo este enfoque la asociación estima que Arias no reúne la idoneidad suficiente para cumplir don los fines de una entidad como la fundación. Casco Antiguo también pide al Ayuntamiento que intervenga.