El Pleno aprueba refinanciar los 1,2 millones de deuda que se pagarán a 20 años

El pleno de Cacabelos aprobó ayer por unanimidad la refinanciación de su deuda con Caja España para frenar, definitivamente, el embargo de los bienes municipales que hace un año promovió la entidad financiera por impagos y que provocó las lágrimas del alcalde, el popular Adolfo Canedo, e iniciativas como la de dejar en manos del azar y la lotería una salida a la maltrecha situación económica municipal.

El acuerdo adoptado, ayer, compromete al tercer municipio del Bierzo a pagar en 20 años los 1,2 millones de euros a Caja España. Esto implica la refinanciación de los cuatro créditos que el consistorio cacabelense tenía concertados con Caja España. Ese acuerdo se ha cerrado, después de un año de negociaciones con la mediación de la presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco, y la autorización extraordinaria de la Junta para que Cacabelos se endeude más allá de lo permitido por ley.

El alcalde firmará hoy ese nuevo préstamo que, en la práctica, supondrá que el consistorio tendrá que desembolsar algo más de ocho mil euros al mes, incluidos intereses. «Esa refinanciación supone un alivio y poco a poco toda la deuda va a aparecer en la contabilidad municipal con un plan de amortización a largo plazo y encajado en el plan de ajuste aprobado. Eso permitirá ir recuperando todos los servicios básicos», explicó Canedo.

Caja España ha perdonado algo más de 300.000 euros al consistorio, unos 150.000 euros condonados de la deuda y el resto de la renuncia a cobrar los intereses por el litigio y las costas y gastos por los procedimientos judiciales.

El pleno también aprobó las fiestas locales: el 1 de abril, Lunes de Pascua, y el 16 de agosto, San Roque.