El Rosal cumple cinco años con el tope en su nivel de ocupación pese a la crisis

El centro comercial El Rosal de Ponferrada, el mayor de la provincia, cumplirá este mes cinco años desde su apertura y lo hará, pese a la crisis, con el mejor nivel de ocupación de su superficie alquilable —50.000 metros cuadrados—. Es uno de los rasgos más destacados por la dirección del complejo en el balance de su primer lustro de actividad. Aunque no precisó el porcentaje alquilado, sí resaltó la estabilidad de firmas como Zara, H&M, Cortefiel, Carrefour, Blanco o Springfield, y los recientes estrenos de las cadenas Bricogroup y Worten.

Desde el punto de vista de la ocupación laboral, el director de El Rosal, Javier Gutiérrez Fugarolas, puso de relieve que los comercios del centro emplean directamente a una plantilla de más de un millar de trabajadores. En el terreno de influencia socioeconómica, la dirección llamó asimismo la atención sobre el reciente acuerdo firmado con el Ayuntamiento de Ponferrada, a través del programa Nuevos Emprendedores, para incentivar la implantación de nuevos negocios en el complejo, y que ya ha dado lugar a las primeras aperturas.

Desde que se inaugurara el 23 de octubre del 2007, por el centro de la capital berciana han pasado en total más de 25 millones de personas. En dicho periodo, desde el punto de vista societario, se ha producido un cambio de propiedad. El año pasado el grupo Sonae Sierra vendió el establecimiento al fondo Doughthy Hanson, que sin embargo ha conservado las riendas de la gestión del mismo.

«Para nosotros es muy importante que nuestros visitantes perciban nuestro espacio como un punto de encuentro y ocio de la zona. Queremos que vengan a El Rosal a disfrutar de una oferta que va mucho más allá de la puramente comercial. Pretendemos que se diviertan y que puedan crear sus propias experiencias. Además, pretendemos ofrecer al visitante una oferta única y completa, que pueda encontrar todo aquello que necesite en un mismo punto. Desde moda, belleza, decoración pasando por los mejores restaurantes y ofertas de ocio», comentó Gutiérrez Fugarolas sobre el espíritu de funcionamiento.

Identificación social

Entre las líneas maestras que se mantienen para potenciar la identificación del recinto de La Rosaleda como punto de referencia no sólo comercial sino social es la involucración en las tradiciones locales y también el compromiso con cualquier iniciativa de índoles solidario.

El Rosal, en el primer campo, se ha convertido en sede en los últimos tiempos del popular Belen de Macario y también ha contribuido a divulgar con exposiciones y otros actos actividades como la Semana Santa o industrias como la minera o la agroalimentaria. El centro seguirá apostando por la eficacia de campañas de colaboración con Oenegés como la Cruz Roja en la distribución de juguetes navideños o con la hermandad de donantes de sangre para aumentar las extracciones de plasma.