Rosa Clará: «En el sector de las novias hay que arriesgar con nuevas alternativas»
Rosa Clará y Silvia Fernández, entre dos modelos, en la inauguración de la tienda ayer.
La diseñadora de vestidos de novia Rosa Clarà acudió ayer a Ponferrada a la inauguración de la ampliación de su tienda en Ponferrada, que regenta Silvia Fernández. El local ha duplicado su espacio para llegar a los 150 metros cuadrados y Clarà destaco «el espíritu emprendedor» de la joven ponferradina que arrancó con tan sólo 22 años hace ya más de una década y actualmente ya es propietaria de otras tres tiendas más, en Logroño, Pamplona y Orense.
«En el sector de las novias hay que arriesgar a pesar de la situación económica con alternativas, como la comunión o los vestidos de fiesta, además de con diseños trabajados», destacó la diseñadora de novias, tras explicar que los modelos para el año que viene están marcados por una línea más clásica junto con otros más arriesgados en corto o en color. Desde hace cuatro años Rosa Clarà vende vestidos de fiesta para las madrinas y las invitadas a la boda y ayer en Ponferrada también presentó la nueva colección para comunión, satisfaciendo así una demanda persistente que existía en la capital berciana.
«En Ponferrada encajan todos los vestidos de las diferentes líneas, desde los más clásicos a los más arriesgados», comentó Silvia Fernández, para añadir que muchas veces la propia diseñadora se sorprendía y decía: «En Ponferrada se compran vestidos que ni siquiera se venden en Barcelona». En este sentido destacó el buen gusto de sus clientas bercianas, donde hay «mucho culto a la moda y buen gusto y eso, en novias, se nota».
La cadena Rosa Clarà tiene actualmente en España 140 tiendas, más de tres mil puntos de venta y cerca de un millar de trabajadores. El 50% de su facturación se hace en el extranjero, tanto en Europa y América como en los países árabes.
La colección para la campaña de novias del 2013 tendrá vestidos hechos en seda mikado o satén con líneas clásicas o tejidos más vaporosos para las novias más atrevidas o que quieren salirse de lo habitual. Diferentes escotes y colores. En los vestidos de fiesta destacan «los colores apetecibles», como indicó la propia diseñadora catalana y, entre los tejidos, destacan la sedas.