Los regantes vetan la mejora del Canal Bajo porque no incluye el precio a pagar

La asamblea de los regantes del Canal Bajo abordó ayer, sin que estuviera incluido en el orden del día, el proyecto para la modernización de los regadíos. La mejora de 400 kilómetros de acequias en Ponferrada, Camponaraya y Carracedelo cuenta con un presupuesto de 28 millones de euros y una subvención europea del 80%, que podría perderse si ayuntamientos, regantes y la sociedad estatal de Aguas de la Cuenca del Norte (Acuanorte) no llegan a un acuerdo que permita licitar la obra antes del 2013. Aunque hace una semana se alcanzó un principio de acuerdo entre todas las partes, la asamblea de regantes criticó ayer duramente el texto por dos cuestiones fundamentales que se centran en el importe a pagar.

Los regantes desconfían de la última propuesta ya que a pesar de incluir una mejora solicitada, no contempla de dónde saldrá el presupuesto para sufragarla. «En el nuevo convenio recuperan las obras desde la acequia 12 a la dos, pero sin un presupuesto después de que redujeran el importe en tres millones. ¿Van a bajar la calidad de la obra?», se preguntó el presidente de los comuneros, Lorenzo García, durante la asamblea. Otra de las críticas del nuevo convenio es la fecha límite de diciembre del 2015.

La directora general de Acuanorte, Isabel Pérez Espinosa, remarcó en el encuentro del lunes que toda obra que supere diciembre de 2015 deberá ser abonada íntegramente por los regantes, ya que supera el plazo de la subvención europea. Según les avanzó Espinosa, «la obra no acabará antes de marzo del 2016, aunque desconocemos el proyecto en sí, cuánto costará y cuánto quedará pendiente», dijo García quien aseveró: «Exigimos conoce el proyecto y el coste cuanto antes».

Campañas de riego

Los conflictos con los ayuntamientos es otro de los principales escollos, ante su prioridad a urbanizar las avenidas que vertebra actualmente el canal y recuperar este espacio, con su soterramiento, para el uso de la ciudad, como es el caso de Ponferrada.

Está previsto que la obra, si se llega a un acuerdo rápido, no comience antes de abril de 2014 y los regantes también exigen que se tenga en cuenta la campaña de regadío, que va de marzo a octubre, para acompasar las obras, lo que a su vez retrasará la actuación entrado el año 2016. Los comuneros deberán «estudiar» los próximos días el borrador que fue remitido a la comunidad de regantes el sábado por la tarde desde la sociedad de aguas. Lorenzo García anunció que se pedirá la presencia de Acuanorte para la siguiente asamblea general extraordinaria, con el objetivo de que expliquen a los regantes exactamente el borrador, ya que deberá ser sometido a votación.

«Esperamos que se acerquen posturas hasta que se celebre la próxima asamblea», precisó Lorenzo García, quien aseguró que la comunidad de regantes presentará batalla hasta el final. Dentro de la asamblea también se levantaron algunas voces críticas que apostaban por apresurar el acuerdo, ante la posibilidad de perder la subvención, aunque otros apostaban «por seguir dando batalla porque las condiciones son inaceptables».