La policía se topó con una descuidada contabilidad «b»
En el entorno del número 2 de Santiago y sobre todo de los investigadores procedentes tanto de Galicia como de Madrid que intervinieron en la operación «Caballo de Troya» no dejó de sorprender durante los registros el poco «cuidado» con el que la familia Martínez Núñez, y en particular la hija de fundador, que les acompañó en todo instante, llevaba la supuesta contabilidad «b» de la compañía.
Es cierto que en algunos de los sobres que se encontraron con dinero tanto en la caja del Banco Santander como en otras dependencias aparecían sólo las iniciales de los presuntos destinatarios. Pero no lo es menos que en algunos otros, entre los fajos de billetes de 500 euros y también de otras muchas cantidades, figuraban nombres de pila con sus dos apellidos.
Incluso se dio la circunstancia de que en algunos sobres figuraban determinados nombres pero en su interior no aparecía dinero alguno ni otra documentación, como «prueba» ingenua de alguna entrega anterior.