El general Servet apela a la unidad contra la crisis

La localidad de San Pedro Castañero celebró este fin de semana la undécima edición de su festival del botillo, un encuentro festivo gastronómico que contó con un mantenedor de excepción, Rubén Carlos García Servet, piloto de profesión, que actualmente ocupa el cargo de comandante del Centro de Operaciones Aéreas de la Otan y general de división del Ejército del Aire. Con una vinculación directa con el Bierzo —su padre era natural de La Ribera de Folgoso y fue maestro en el municipio de Castropodame— García Servet se mostraba tan berciano como el que más: «No se es de donde se nace, ni de donde se crece, ni de donde se mora, sino del lugar donde late el corazón. Mi corazón será siempre rabiosamente leonés y berciano», manifestó en este evento gastronómico.

García Servet ofreció un discurso «breve pero con mensaje», según el mismo lo resumía. Apuntó incluso una breve referencia a la situación actual y la receta «de esperanza» para superarla. «Es hora de gritar a los cuatro vientos que el egoísmo, el interés personal, la insolidaridad, la especulación y la estafa, que con todo eso no se puede construir nada», aseguró. Y añadía más: «La receta para construir un futuro no es otra que el duro trabajo, pocas exigencias. Basta ya de quejas y lamentos, basta ya de paro, crisis y tristezas. Echemos de casa el desánimo y disfrutemos el momento seguros de que, si permanecemos juntos, nada podrá con nosotros.

Tras la intervención y antes de la cena de la que participaron dos centenares de comensales se intercambiaron regalos. San Pedro Castañero regaló a su mantenedor un set para la degustación de caldos bercianos, y García Servet, «como todo lo veo desde el aire», correspondió con dos imágenes aéreas de la población de San Pedro Castañero, una de 1945 y una última de 2008.