DDM prepara el despido de 39 operarios por la caída del mercado de automoción

La fabricante de piezas y moldes para el sector de la automoción, la compañía DDM, ultima un expediente despido colectivo que afectará hasta a 39 de sus 55 empleados en el polígono industrial de Cabañas Raras, donde opera principalmente. Aunque la empresa cuenta también contra trabajadores en Asturias, donde tiene la sede de su departamento de ingeniería. La sociedad que dirige el industrial José Antonio Pacios presentó la semana pasada el correspondiente expediente de extinción de contratos en la oficina de Trabajo de la Junta de Castilla y León. El motivo de los despidos es oficialmente la caída de pedidos procedentes de las principales multinacionales automovilísticas para las que trabaja en España, entre ellas Citröen y Renault.

Pese a todo, y aunque a los trabajadores ya se les ha notificado por carta esta situación, pese a que al parecer todavía no estarían concretados los nombres de los despedidos, la dirección de la compañía sostuvo ayer en declaraciones a este periódico que todavía se encuentra negociando la posibilidad de nuevas cargas de trabajo para evitar en la medida de lo posible una solución tan traumática.

A falta de que ese supuesto diálogo para incrementar los pedidos pueda llegar a buen puerto in extremis, lo cierto es que el expediente de despido afectaría mayoritariamente a los empleados de la sección de inyección de plástico para la fabricación de las distintas carcasas que se emplean en el montaje de vehículos. A falta de la presencia de los sindicatos mayoritarios y de un comité de empresa, la compañía ha pedido a la plantilla que designe a tres representantes de cara a entablar un diálogo acerca de las condiciones en las que se produciría las bajas.

Premio

El grupo DDM, que integran las sociedades DDM Matricería y Moldes y DDM Matricería Plastic, se había convertido en los últimos tiempos en una de las principales referencias industriales como modelo de supervivencia a los duros embates de la crisis en la comarca del Bierzo. Su facturación anual ha sobrepasado incluso los 15 millones de euros y también cuenta con otra serie de contratos con compañías del sector armamentístico. Por esa razón, entre otras, se da la paradoja de que hace apenas dos semanas la junta directiva de la FELE en el Bierzo decidió elegir como empresario del año en la comarca a su administrador, José Antonio Pacios Rivera, que será distinguido como tal el próximo 24 de mayo en un acto público.