La plantilla cree en el futuro de la Ciuden y pide que el museo siga siendo nacional
El comité iniciará contactos para recabar el apoyo de agentes sociales y políticos.
Los miembros del comité de empresa de la Fundación Ciudad de la Energía comparecieron ayer en rueda de prensa.
La reunión que el comité de empresa de la Fundación Ciudad de la Energía mantuvo el pasado martes con la dirección general para abordar la situación actual del organismo después de que el Gobierno haya anunciado su integración parcial en el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (Idae) ha dejado más tranquila a la plantilla de 137 trabajadores. Confían en el futuro de la Ciuden aún estando integrada en un ente superior y en que se respetará la plantilla tal y como está en estos momentos después de que a finales del pasado año se iniciara un plan de ajuste que concluyó hace unos meses con el despido de 43 trabajadores.
Y es que el informe elaborado por la Comisión para la Reforma de las Administraciones Públicas no ha tenido en cuenta dicho expediente de regulación y se ha basado en datos anteriores a su ejecución. «La dirección general nos ha transmitido que la plantilla actual es ajustada, adecuada y negociada, y que el ajuste que el Gobierno central pretende hacer ya se realizó, por lo que tenemos los deberes hechos», explicó la presidenta del comité de empresa, María Cañón, reproduciendo las palabras literales pronunciadas por el director general, Melchor Ruiz. Por lo tanto, los ajustes necesarios para hacer sostenible la Fundación se hicieron ya hace meses y los cambios actuales en nada afectarán ni a la plantilla ni a los dos proyectos que abandera la Ciuden: la captura y el almacenamiento de CO2 y el Museo de la Energía. Este es el convencimiento del comité, que ha manifestado, no obstante, «incertidumbre» y «preocupación» mientras se resuelve el proceso hasta la adscripción de los dos proyectos a «los organismos que se consideren competentes».
Por ello, la representación de los trabajadores ha pedido a la dirección general de la Fundación a la que pertenecen que «nos haga un feedback de toda la ejecución que llevará a cabo la Oficina para la Ejecución de la Reforma de las Administraciones», apuntó Cañón, adelantando que la plantilla considera «fundamental» que el Museo de la Energía «siga siendo nacional y dependiente del Gobierno central». «Pretendemos saber cuanto antes la adscripción orgánica y pública», añadió la presidenta del comité, adelantando que su intención es iniciar inmediatamente una ronda de contactos con los agentes sociales y políticos a nivel local, comarcal, provincial, autonómico y nacional para «explicarles la situación actual y solicitar apoyo total y alternativas al cambio».
«Nuestro deseo es seguir trabajando como hasta ahora, involucrados en todos los proyectos de la Fundación. Desde la dirección general se nos ha transmitido en todo momento tranquilidad y positividad, y que debemos seguir trabajando porque los proyectos siguen en marcha», dijo Cañón.