La acerera berciana ha perdido cien obreros en los últimos cinco años

Si bien Aceros Roldán sigue siendo una de las principales empleadoras de la comarca, la más importante en el terreno industrial después del descalabro de las grandes empresas del sector, su plantilla también ha sufrido ajustes desde que la crisis empezó a ser más aguda y no sólo temporales. Desde el año 2008, la fábrica de Santo Tomás de las Ollas ha perdido alrededor de un centenar de trabajadores, tal y como recordó el presidente del comité de empresa, Miguel Ángel Arias, aclarando, eso sí, que la mayor parte de las bajas han sido de trabajadores con contratos temporales que cumplieron la vigencia del mismo y no fueron renovados. En lo que va de año alrededor de media docena de obreros han cesado su actividad ante la finalización de su contrato.

«Estamos hablando de que en el año 2008 éramos unos 500 trabajadores en plantilla y ahora hay poco más de 400. Son cien personas que se han ido a la calle en los últimos cinco años», apuntó Arias, ahondando en que «sin embargo, en otros casos sí que ha habido renovaciones. Depende del puesto que ocupe cada uno y de las necesidades de la fábrica», explicó.

Sea como fuere y a pesar de la reducción de plantilla, Roldán sigue siendo el buque insignia de la industria berciana, lo que no quita que sus trabajadores tengan «temor» ante la parálisis absoluta de la economía y el horizonte igual de negativo que dibuja el sector.