«Si nos remitimos a las consecuencias, pactar con Ismael Álvarez fue un error»

Fue la primera mujer, y todavía la única, en presidir el Consejo del Bierzo. Militante histórica del PSOE en Ponferrada, Rita Prada, no cree que su larga trayectoria pueda ser un problema a la hora de dirigir la renovación de un partido que no levanta cabeza desde los tiempos de César Gavela.

—El PSOE lleva 20 años en caída libre en Ponferrada. Primero perdió la alcaldía, después sufrió el transfuguismo y parecía que había tocado fondo cuando se disolvió la agrupación. Pero recientemente ha pasado por el episodio traumático de la moción de censura, que le ha dejado por primera sin grupo municipal. ¿Qué se ha hecho mal en estos 20 años y qué tiene que hacerse bien a partir de ahora?

—Por lo visto se ha hecho todo mal, porque hemos ido en caída libre. Creo que ha habido unas influencias de fuera, extrañas, y probablemente, unas ejecutivas débiles cuya gestión no ha contentado a militantes y a personas. Han intentado ir por esas ejecutivas y se las han cargado. O nos las hemos cargado. Yo no me libro de lo que sea. Eso es lo que tenemos que intentar evitar. Y con influencias extrañas, me refiero a influencias de algunas agrupaciones hasta incluso del Bierzo que veían una unión en Ponferrada. La gestión pública de determinados militantes o cargos públicos terminó y se fueron a sus casas como es lógico y aquello debilitó la agrupación de Ponferrada.

—¿El enemigo estaba en casa?

—En casa y fuera. Pero siempre son peores los enemigos de casa que los de fuera. Los enemigos de fuera los ves. Los enemigos de casa no los ves. Luego también empezaron a decaer los puestos y eso fue un handicap . Y tampoco acertamos, porque me incluyo, en muchas cosas. Tenemos que poner punto y final a esto y resurgir, hacer una agrupación fuerte. Y no importa tanto el número de militantes como la manera de trabajar. Las ideas y una vida orgánica activa para influir en la sociedad y que nos empiece a dar la confianza que en su momento nos ofreció.

—Le voy a pedir que me diga nombres de esos enemigos internos.

—No creo que tengan nombres y apellidos. Es un cúmulo de personas, de sensaciones. No voy a cargar contra determinadas personas porque no sería justo. Nosotros mismos nos debilitamos.

—El PSOE en Ponferrada está estratificado en familias. ¿Puede salir adelante con esa forma de entender la política?

—Eso es malo. Si el fin es el mismo, los medios pueden diferir. Pero no se pueden hacer las cosas desde el resentimiento. Yo misma he perdido casi toda mi vida en las asambleas. He estado en la parte que se podía llamar crítica. Pero una vez que no logras lo que propones, tienes que callarte, asumir las mayorías, aunque no siempre tengan la razón, e intentar trabajar e integrarte en el partido. Tender la mano unos y otros y salir a la calle como una sola voz. Y eso, en Ponferrada no lo ha habido. Llevamos una racha que es imposible para un partido en estas circunstancias ganar la confianza del electorado. Lo esencial es el trabajo, la unión y tirar hacia delante.

—¿Pilota usted la renovación en el PSOE, pero es una de las voces más veteranas?

—Sí.

—¿No es contradictorio?

—Yo siempre dije que la edad no importa...

—No me refiero tanto a la edad como a la trayectoria...

—No creo que la trayectoria pueda perjudicarme. En esta ejecutiva también hay gente joven y muy válida. Pueden ser el futuro de este partido una vez que termine este periodo en el que estamos y vaya siendo hora de que cojan las riendas. Pero no sólo los que van en la lista y en la ejecutiva que conformaremos el lunes (mañana), también los que iban en la otra lista y los que estaban en la asamblea. Hay que atraer a la juventud para que empiece a organizarse y a integrarse y juntos, veteranos con menos veteranos, salir adelante.

—Sobre un hipotético regreso de Samuel Folgueral y su grupo de concejales no adscritos al PSOE, ha dicho usted que ‘no se puede perder capital humano’ en el partido. ¿Trabajará para reintegrarlos y no perder ese capital humano?...

—Creo que hay que clarificar, de una vez por todas...

—Se lo voy a preguntar directamente. ¿Samuel Folgueral sería un buen candidato para el PSOE después de todo lo que ha pasado?

—Voy a intentar explicarme de una vez por todas... De ese tema no toca hablar. Mi intención era que mediáticamente tuviéramos una resonancia para trabajar, para hacer cosas, para integrar y a lo mejor yo misma he metido la pata con lo que dije. No lo sé. Pero tengo claro que ese tema no toca ahora mismo porque no estamos trabajando en esa dirección. Lo que pretende es trabajar en la dirección de pensar en un futuro. Hay una serie de televisión que me gusta mucho. Se llama Friends , que era intentar meterse en el futuro obviando el presente y mirando al pasado. Eso es imposible. Es ciencia ficción y en la vida no existe. Así que vayamos pasito a pasito a ver lo que ocurre. El PSOE de Ponferrada no puede trabajar con vistas al regreso o no regreso de una serie de personas. Tiene que trabajar por su cuenta y para el bien de los ciudadanos. Ese es un tema que probablemente tengamos que tocar en algún momento. Pero hoy no.

—Vista en perspectiva, ¿la moción de censura fue un error? ¿Fue un error pactar con el grupo de Ismael Álvarez?

—No lo sé si fue un error o no. Si nos remitimos a las consecuencias que ha traído, que el PSOE no tenga grupo municipal, que las personas que ahora están gobernando sean ex compañeros, no adscritos a ningún grupo, visto de esa forma fue un error. Pero no puedo decir más porque no sé cómo hubiera sido de otra forma.

—Dentro de la agrupación hay una serie de militantes que tienen claro que fue un error desde el primer momento. Se ha quejado usted de que hay nuevos militantes que se están afiliando a través de Internet y luego no comunican su alta a la agrupación. ¿Teme un pulso en la asamblea?

—No lo creo. En absoluto. Tengo buena relación con Javier Campos. No creo que sea difícil llegar a un entendimiento. Eso sí, cediendo cada uno. Lo que no estoy dispuesto es que unas personas o compañeros me dicten lo que tengo que hacer. A eso no estoy dispuesta. Hemos salidos elegidos por la mayoría de una asamblea que nos ha dado el derecho a tener actividad orgánica en la agrupación de Ponferrada del Partido Socialista. Y eso pretendemos.

—¿El próximo candidato socialista a la alcaldía de Ponferrada debería salir de unas primarias?

—Sí. Soy partidaria de las primarias y lo he sido siempre.