Un grafiti en el Puente Boeza abre el lavado de cara de zonas degradadas

El nombre de la capital del Bierzo escrito en unas grandes letras azules sobre una línea amarilla que representa el Camino de Santiago y dos puntos resaltados: el Castillo de los Templarios y la Basílica de la Encina, los dos monumentos más característicos de Ponferrada. Así es el grafiti que recibe a los peregrinos que entran en Ponferrada por el Puente Boeza y aporta frescura a un espacio hasta ahora degradado. Un ejemplo de las muchas intervenciones que se harán de ahora en adelante dentro del programa «Lávale la cara a tu ciudad» con el que el Ayuntamiento pretende no sólo limpiar los muros manchados por pintadas, sino aprovechar aquellos espacios que tienen más potencial para convertir esta práctica —en la mayoría de los casos vandálica— en arte urbano de verdad. Lo mismo se ha hecho ya en el colegio Navaliegos y se hará en el de San Antonio, así como en otros centros escolares degradados.

En el próximo año se invertirán 20.000 euros tanto en limpiar los muros y superficies de las zonas y monumentos históricos de la ciudad como en pintar otras susceptibles de ello. El buzoneo iniciado hace semanas ha hecho ya efectos y son muchos los propietarios de inmuebles o comunidades de vecinos las que han puesto sus fachadas a disposición del Ayuntamiento para actuar sobre ellas. El coste es mínimo, básicamente el material, ya que de la obra se encargan grafiteros de la ciudad.

Pero además de ‘decorar’ la ciudad con representaciones artísticas de este calibre, los grafitis se utilizarán también para guiar a los peregrinos por las calles de Ponferrada, por ejemplo desde las estaciones de tren y autobuses, y como elemento identificativo de cara al Mundial de Ciclismo. Habrá grafitis simbólicos a lo largo de su recorrido, según detallaron ayer los ediles de Cultura y Conservación, Santiago Macías, y Deportes y Juventud, Sergio Gallardo.