ECONOMÍA Y MEDIO AMBIENTE
La FOP pide apoyo a apicultores para prevenir los ataques del oso
Propone ayudas específicas para instalar vallados eléctricos
Buscar un punto intermedio en el que la creciente población de oso pardo cantábrico pueda convivir perfectamente con determinadas actividades económicas, fundamentalmente del sector agropecuario. Este es uno de los principales objetivos de la Fundación Oso Pardo (FOP), que se ha puesto a disposición de los apicultores para colaborar con ellos en la prevención de los tradicionales ataques que, por estas fechas, sufren la colmenas instaladas en las zonas oseras. El último caso conocido tuvo lugar en Peranzanes. Aquí el oso cavó un enorme socavón para sortear el vallado perimetral instalado y hacerse con la miel de una decena de colmenas.
El coordinador de proyectos de este colectivo ecologista, José Luis García, afirmó que desde la Fundación de la que forma parte están intentado conseguir recursos para comprar pastores eléctricos que luego reparten entre los apicultores. Es una forma de colaboración que no se queda ahí. Igualmente reclaman a la Administración, en este caso a la Junta de Castilla y León, que es la que tiene competencias en materia de Medio Ambiente, que apoye a los productores de miel con medidas preventivas «para que sufran en la menor medida posible el ataque del oso pardo», apuntó García.
Actualmente, los recursos de entidades como la FOP son limitados, de ahí que la adquisición de pastores de este tipo se vea limitado. Por ello es necesario el apoyo del sector público y, en este sentido, —dijo el coordinador— «les apoyaremos en lo que esté de nuestra mano».