Ponferrada da carpetazo al proyecto urbanístico de la Gran Manzana

El proyecto de reparcelación y urbanización que fue aprobado inicialmente en el año 2009 con el fin de recalificar la parcela ubicada frente al complejo de la Gran Manzana de Ponferrada para construir en la misma viviendas ha quedado definitivamente desestimado, lo que da cuenta de la parálisis absoluta que vive el sector inmobiliario en una ciudad donde la construcción fue durante muchos años el buque insignia de la economía y la base de los años de oro. No hay más que ver el barrio de La Rosaleda.

La Comisión de Urbanismo celebrada ayer en el Ayuntamiento de Ponferrada aceptó la renuncia presentada por el particular propietario del terreno a seguir al desarrollo del proyecto y dio carpetazo definitivo a la edificación de más de 200 viviendas —unifamiliares y en bloques de pisos— en una parcela de más de 50.000 metros cuadrados en la que se reservaba una extensión importante para la construcción de espacios de recreo, equipamientos urbanos y viales, así como la creación de más de 300 plazas de aparcamiento.

«Estamos hablando de un sector de suelo urbano no consolidad, el SUB-11, para que en el año 2009 se había aprobado inicialmente un proyecto de actuación y finalmente el particular ha desistido de desarrollarlo», explicó el alcalde de la ciudad, Samuel Folgueral, detallando que si bien el propietario ha asegura que su intención es «hacerlo por partes», la única realidad es que «de momento eso sólo es una intención y lo que ha planteado oficialmente es el desestimiento del desarrollo de este sector.

La parcela en cuestión es la que se ubica justo en la margen derecha del vial que comunica con la zona de ocio nocturno de la Gran Manzana, en un terreno de tierra que habitualmente los usuarios de este recinto utilizan como aparcamiento, limitando con el barrio de Cuatrovientos.