Una matrícula permite cinco detenciones por los robos y destrozos en 50 coches

Los números de la matrícula de un coche sospechoso que salía a una hora intempestiva del interior de un garaje puso a la Policía Nacional en la pista certera. Así, con un discreto seguimiento, permitió finalmente la detención de cinco personas relacionadas con la ola de robos y destrozos de las últimas semanas en al menos medio centenar de coches aparcados en garajes comunitarios de varios barrios de Ponferrada.

La operación policial está aún en marcha y no se descartan más detenciones. La identidad de los ahora arrestados en dependencias policiales no ha sido facilitada por la Subdelegación del Gobierno dado que el operativo está igualmente vinculado a un procedimiento judicial en marcha. Eso sí, este periódico ha podido saber por otras fuentes que se trata de personas vecinas de la ciudad y nativos de diferentes poblaciones del Bierzo, algunos de ellos bien conocidos por la policía de Ponferrada por su dilatado historial delictivo a pequeña escala.

De momento ha trascendido que de los cinco detenidos, dos son mujeres. Aunque a última hora de ayer desde la Subdelegación del Gobierno indicaban que esta cifra podía variar.

Aunque con el comienzo de la semana eran treinta las denuncias recibidas en la Comisaría de Ponferrada, ayer la cifra ya había aumentado hasta el medio centenar, y no se descartaba que incluso sobrepasase los cincuenta hurtos y destrozos en la luna de otros tantos vehículos particulares. Todos estaban aparcados en garajes comunitarios de edificios de viviendas.

En la madrugada del pasado martes, incluso después de que ya se conociera por la mayoría de que el asunto estaba causando una gran alarma social, los delincuentes volvieron a las andadas. Entraron en un aparcamiento situado en los bajos de una cooperativa de viviendas del Polígono de las Huertas. Allí volvieron a repetir la escena que ya conocen propietarios de coches que estaban estacionados en garajes del barrio de Los Judíos (avenida de América, calle Rosalía de Castro) y de La Estación (avenida del Ferrocarril), así como de La Rosaleda (intersección del bulevar Juan Carlos I). Los turismos aparecieron con una de las ventanas rotas y con el interior revuelto. En la mayoría de los casos incluso ni lograron llevarse nada. Sólo unas gafas usadas y algún que otro navegador del tipo GPS portátil. También monedas de las que se dejan entre el salpicadero y los asientos.

Registro domiciliario

Como anécdota se da la circunstancia de que uno del medio centenar de afectados por los destrozos y robos en el coche fue el propio alcalde de Ponferrada. A Samuel Folgueral también le rompieron la luna de su vehículo e interpuso como la mayoría una denuncia en Comisaría. Una vez que se cierre el operativo, en el que se también figura algún que otro registro domiciliario, los detenidos serán puestos a disposición judicial. Se da la circunstancia que la policía ha logrado recuperar alguno de los objetos sustraídos en los vehículos.