Folgueral: «La oposición ya tiene la relación de ingresos y gastos del Mundial

El alcalde de Ponferrada, Samuel Folgueral, aseguró ayer que la oposición municipal ya cuento «desde hace unos días» con una «relación de ingresos y gastos» del Mundial de Ciclismo incluidos en el resultado provisional de la encomienda de gestión de la prueba deportiva, que todavía está «pendiente de la verificación de la Intervención Municipal».

Folgueral entiende que su equipo de gobierno ha cumplido así con la principal exigencia que tanto el PP como el PSOE le había puesto sobre la mesa para negociar la aprobación del presupuesto municipal de este año, que era informar de las cuentas del Mundial de Ciclismo.

El alcalde confirmó además que su equipo «está de acuerdo» con las propuestas de la edil socialista Paula Rodríguez para incluir beneficios fiscales y bonificaciones a la apertura de nuevos locales comerciales y para crear un fondo con el que subvencionar alquileres sociales y la compra de libros escolares por parte de familias más necesitadas. Son propuestas, insistió, que «compartimos plenamente».

El regidor añadió que el PP también ha recibido la documentación añadida que solicitaba antes de pronunciarse por lo que entiende que «ya no hay ningún inconveniente ni excusa» para alcanzar un acuerdo con la oposición que garantice la aprobación de los presupuestos de este año. Folgueral recalcó que de la aprobación de las cuentas municipales dependen cuestiones básicas para la ciudad como «el empleo» y los fondos que deben recibir los colectivos sociales y no se puede demorar más la firma de un acuerdo. El alcalde respondía así a los últimos requerimientos del PP y del PSOE para que el equipo de gobierno de los concejales no adscritos e IAP presente las cuentas del Mundial de Ciclismo. La única edil socialista, Paula Rodríguez había condicionado su apoyo a los presupuestos especialmente a la presentación de las cuentas de la prueba.

El PP, por su parte, molesto porque el bipartito no ha incluido sus propuestas, ha pedido que se deje sin aprobar el presupuesto para que sea la próxima corporación la que lo saque adelante.