Parnasillo en la Casa de León

Gil y Carrasco en muchas voces literarias leonesas fue el argumento de la Casa de León en Madrid para homenajear al escritor romántico por antonomasia del Noroeste, en lo que se convirtió en un auténtico Parnasillo poético. El villafranquino vivió poco pero dejó mucha huella, y ayer en la calle Pez quedó constancia con algunas de las firmas más importantes no sólo de la provincia sino de la literatura española. Por eso, el cartel, por así decirlo, coincidiendo con los actos del segundo centenario de Enrique Gil y Carrasco fue de gran celebración, como si la ronda poética en torno al autor de El Señor de Bembibre tuviera el tono de la reivindicación definitiva de su importancia. Sobre todo, porque pocas veces coinciden tantos: Luis Mateo Díez, José María Merino, Juan Pedro Aparicio, Juan Carlos Mestre, Marifé Santiago, Raquel Lanseros, Valentín Carrera, Santiago Trancón, Sara R. Gallardo... y así hasta una decena de autores diversos en cuanto a procedencia y obra. Luis Mateo Díez ponía en valor la importancia de Gil «como alguien que con poca obra destacó, viajó, y conoció a Espronceda, que es el que le introduce en el Romanticismo», explicaba antes de comenzar el acto.