Cigüeña en apuros recibe ayuda

Molinaseca puede creer que es San Blas porque sus vecinos han visto la cigüeña, su plumaje blanco y negro, un forraje que el folclore polaco explicaba como una obra mixta de dios y el diablo. Pero todos saben que no es San Blas, la cigüeña también.

Los vecinos de Molinaseca encontraron una cigüeña el miércoles, a las 16.00 horas, en el aparcamiento privado de la casa rural El Reloj. Tres niños —Marta, Lucas y Álvaro— tal vez como agradecimiento a las aves que en los cuentos de Andersen transportaban a los recién nacidos hasta la casa de unos padres que esperaban a su retoño con ansias, le dieron pan y agua a la desorientada cigüeña. Cristina y Eva, vecinas de Molina, intentaron darle una solución al asunto, pero parecía no ser el día del ave. Avisaron el jueves a una protectora de animales de León, pero la asociación dijo encontrarse «muy lejos» para solucionar el problema. Su segunda opción fue llamar al 112, que dijo que avisaría a la policía, pero al no obtener respuesta, Eva y Cristina decidieron llamar directamente a las fuerzas de seguridad, desde donde tampoco se les ofreció solución alguna, haciendo caso omiso a la solicitud de socorro de estas vecinas. Por tanto, el animal sigue en el aparcamiento, sobreviviendo gracias a los cuidados de unos vecinos que quizá sí sepan que es un ave en peligro de extinción.