Suárez-Quiñones promete políticas para «devolver el esplendor al Bierzo»

El consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones reiteró ayer el compromiso del presidente autonómico, Juan Vicente Herrera, y el de toda la institución «en todo aquello que esté en nuestra mano, en el ámbito competencial y presupuestario, para devolver el esplendor al Bierzo», aseguró, instantes después de que el presidente del Consejo Comarcal reclamara a la Junta más competencias y una financiación propia para la institución.

El consejero le dedicó tiempo a hablar del descenso del desempleo, que en el Bierzo ha caído en algo más de mil personas este año, aunque recalcó que si la Junta tiene «mil cuarenta razones para estar satisfecho», en alusión a los nuevos puestos de trabajo en la comarca, también tiene «doce mil razones para estar preocupados», añadió en referencia el número de bercianos que siguen en paro. Suárez Quiñones aseguró que la reactivación del sector industrial hasta lograr que suponga el 20 por ciento del Producto Interior Bruto de Castilla y León (ahora es el 16 por ciento) es uno de los objetivos inmediatos de la Junta, que destinará en los próximos cuatro años 600 millones de euros en políticas de empleo para toda la comunidad.

Y no se olvidó de reivindicar, de nuevo, el apoyo de su administración al sector del carbón, reclamando, una bonificación del impuesto del céntimo verde sobre el mineral para hacerlo más competitivo respecto al carbón internacional, como medida paralela al mecanismo de pagos por capacidad que el Ministerio de Industria ha remitido a la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia antes de ponerlo en marcha. Todo ello acompañado de «un plan social digno» para las cuencas mineras, en una estrategia que implique a todas las consejerías.

Como ya adelantó en una entrevista con Diario de León, el consejero de Fomento y Medio Ambiente, reiteró que en próximas fechas presentará en el Bierzo un plan especial contra incendios para la comarca, en vista de que sigue siendo una de las zonas de Castilla y León con mayor incidencia.

El plan, añadió Suárez Quiñones, implicará «mayor vigilancia y una mayor inversión en tratamientos selvícolas en los montes y zonas próximas a poblaciones».