La inoculación contra el chancro, en primavera pero sin ayudas al 100%

No hay presencia de avispilla en el Bierzo pero el chancro sí afecta, sino al cien por cien del territorio, sí al 99,9% de los sotos y al 70% de los árboles. Esto reduce al mínimo la resistencia de los castaños frente a la previsible llegada de la avispilla. «Los árboles ya están debilitados por el chancro y el efecto de pérdida será mucho mayor que en zonas como Málaga, donde no hay chancro, o Galicia, que casi no tiene», explicó el presidente de la Mesa del Castaño, Ángel García Miranda. Por eso, el primer paso en la prevención debería ser la recuperación de las ayudas para la inoculación de los castaños que permita a los árboles recuperarse y hacerse resistentes al chancro. Algo que ya se ha hecho en algunas zonas del Bierzo y está funcionando y que, tras cuatro años de paralización, podría recuperarse de cara a la próxima primavera. Eso sí, las ayudas no serán como hasta ahora estaban concebidas.

La Mesa del Castaño del Bierzo negocia con la Junta de Castilla y León las condiciones y, en principio, los propios castañicultores tendrán que correr con los gastos derivados de la inoculación propiamente dicha. Eso sí, no todas las zonas se verán beneficiadas, sino que la acción estarán restringida a los municipios integrados de la Mesa del Castaño y zonas donde hay sotos viables y compromiso de tratamiento a largo plazo. En este caso, la Mesa se encargaría de la fase de identificación y valoración, la Junta de la producción del inóculo (la pasta de tratamiento) y el castañicultor costearía su aplicación con posibles rebajas. Es decir, asumiría sobre el 25% de la inversión.