TRIBUNALES
El fiscal pide que el Rambo de Quilós pase once años en la cárcel por su arsenal de armas
La defensa exige la absolución: «Tenía licencia de armas y era coleccionista»
Uno de los vídeos que muestran al acusado utilizando las armas
El Ministerio Fiscal propone una pena de once años de prisión para un vecino de Quilós al que se acusa de disponer de un arsenal de armas y municiones. Su defensa niega los hechos y exigirá la libre absolución en el juicio que se celebrará en la Audiencia Provincial el próximo día 23 de noviembre, a partir de las 10.00 horas.
De acuerdo al escrito de calificaciones provisionales firmado por el Ministerio Público, el sospechoso había hecho «exhibición pública y aspaviento» de tener en su poder municiones armas y material explosivo no autorizado por la ley. Aparecía en varias grabaciones de Youtube utilizando algunas de estas armas «disparando varios fusiles simultáneamente» con grave riesgo de seguridad para las personas que pudieran pasar por la zona «por la dificultad de manejo conjunto de las mismas».
Las imágenes muestran al imputado disparando un fusil, una escopeta y una pistola en una zona de bosque no definida. La detención se practicó tras ser grabado amenazando con armas blancas a personas no identificadas. Fue el 14 de abril de 2010, tras firmarse la orden de entrada y registro de su domicilio, en el que se encontraron tres escopetas, dos carabinas, cuatro fusiles Cetme, una pistola Valtro, otras tres pistolas y dos revólveres de imitación, 69 cartuchos de calibre 7,62, 6 cartuchos del 5,56, dos cartuchos más de calibre 50 y otros siete del 7,62. Toda esta munición está considerada por la OTAN como munición de guerra y su uso en el caso de particulares está prohibido, según especifica el Ministerio Fiscal. Además, el Ministerio Público entiende que el sospechoso no dispone de la condición de coleccionista, por lo que está vedado a su persona el uso de este tipo de armamento.
Igualmente se encontró en su poder 101 cartuchos de munición normal de diferentes calibres en buen estado de conservación y disponibles para su uso. 326 cartuchos más de calibre 22LR y dos cargadores con capacidad para 20 cartuchos del calibre 7,62.
Finalmente el procesado tenía en su poder una cerbatana perfeccionada de color azul, de un metro de largo y provista de seis dardos para su utilización. Había también entre sus pertenencias dos tiragomas perfeccionados, dos bates de madera, uno de 82 centímetros y otro de 61 así como ocho bayonetas.