El turismo temático del vino toma cuerpo

Más allá de las cifras, en un mundo como el del vino, que entra por los sentidos, la sensación es que la apuesta por el enoturismo —que la comarca abrazó, más allá de los visionarios que lo anunciaron hace más de una década, de forma mayoritaria hace un par de años— ha penetrado en la región vitivinícola del Bierzo para quedarse.

‘No hay marcha atrás’. ‘Ese es el futuro’. Son las frases más repetidas entre los profesionales de un sector que apuesta por la convergencia de toda la oferta que pueda atesorar la comarca con el banderín de enganche del mundo de la enología. «Desde hace dos años sí que se ha notado que hay más visitas a bodega, que se cierran más grupos, sobre todo en los fines de semana y muy especialmente en los puentes», apunta el enólogo de Bodegas del Abad, Miguel Tienda, quien señala que el perfil del enoturista que se acerca al Bierzo es «nacional, de entre 30 y 50 años, que suele venir en familia o en un grupo organizado».

Un estrato de la población de alto interés para la zona, habida cuanta de su «medio/alto poder adquisitivo», apunta José Luis Prada, uno de los más veteranos en la comarca a la hora de apostar por el desarrollo del turismo ligado al vino. «No hace falta hablar, sólo hace falta que vean», señala Prada quien remarca que «en esta época del año el Bierzo está precioso». Y es que el enoturismo es un turismo de sensaciones, «de experiencias únicas». Y en eso la comarca del Bierzo «es un territorio privilegiado pues nadie puede contar con dos patrimonios de la humanidad de Las Médulas y el Camino de Santiago», señalan desde Bierzo Enoturismo.

«Vista una bodega, vistas todas», apuntaba en su intervención en la Uned de Ponferrada el responsable de Turismo Porto e Norte de Portugal, Agostinho Peixoto, a la vez que incidía en la necesidad de «cuidar el entorno paisajístico, preservar las tradiciones genuinas, apostar por la diversidad y la calidad de los establecimientos, así como la profesionalización del personal que debe atender a los clientes».

«Eso es por lo que venimos apostando nosotros desde hace diez años», replicaba Prada. En esa misma dirección apuntan desde la Bodega Cuatro Pasos —que hoy ha programado actividades de mañana y tarde (maridando vino con quesos y, posteriormente, con productos elaborados con la castaña como base) para celebrar el Día Europeo del Enoturismo— recordando sus trabajos en defensa del oso pardo o las replantaciones de árboles para mejorar su hábitat. «La gente lo que busca son experiencias. Ahí el vino adquiere otra dimensión», señalan desde la bodega cacabelense.

Si en algo incide la mayoría de representantes del sector es que el despertar de la comarca a la enología vino de la mano de la asociación Bierzo Enoturismo, y la inclusión de esta región vitivinícola como una de las 25 que forman las Rutas del Vino de España. En esta asociación se dan cita más se setenta socios, tanto de la iniciativa privada como del sector público, que comercializan más de un centenar de productos con los que atraer a potenciales visitantes a la comarca.

Desde una ‘Cita con el enólogo’ —con un precio que puede oscilar entre los cinco y los 37 euros por persona, dependiendo del número de vinos a catar y si estos están ‘maridados’ con una buena cena— a una ‘Ruta circular a dos ruedas’, con un recorrido en bicicleta por la zona vitivinícola de Valtuille que incluye visita a bodega, cata de vinos y almuerzo en un restaurante al precio de 35 euros, recorridos a caballo con parada en Las Médulas, catas de orujos, o un fin de semana enogastronómico al precio de 215 euros por persona —395 euros si es luxury—, son algunas de las ofertas con las que el Bierzo está haciéndose un hueco en el mundo del enoturismo.

Un mundo que, por en momento, se constriñe a las fronteras nacionales. De hecho «el 98% de los enoturistas que nos han visitado es turismo nacional, mientras que el otro 2% son extranjeros que aprovechando el Camino de Santiago han querido conocer nuestra zona de producción», apunta el gerente de Bierzo Enoturismo, Rubén García Franco.

Hace dos años que la Ruta del Vino del Bierzo fue incluida en las Rutas de España con lo que antes de que finalice el año tendrá que someterse a una auditoría para conocer si sigue mereciendo tal distinción. Dos años en los que la marca Bierzo ha conseguido un mejor posicionamiento en el sector.

Entre los retos de 2016 figuran la ampliación de socios con la entrada de ocho empresas más, la apuesta por la formación, la flexibilización de los horarios «sobre todo en los fines de semana» y la apuesta por la internacionalización «entrando en contacto con tour operadores para atraer a visitantes de otros países».