Recogen firmas de apoyo al vecino de Quilós acusado de guardar un arsenal
Ven «desproporcionada» la pena de 11 años que pide el fiscal por tenencia de armas.
Las hojas con la petición de firmas circulan por todo el municipio de Cacabelos.
«Ha cometido un error, pero es una persona integrada en la sociedad, que se ocupa de los dos hijos de su pareja, y resulta desproporcionado pedir 11 años de cárcel. Le rompería la vida». Así se expresaba ayer el párroco de Cacabelos, Jesús Álvarez, para pedir «proporcionalidad» y «una oportunidad» para el vecino de Quilós M. A. R. G, de 36 años, que el próximo lunes será juzgado en la Audiencia Provincial de León por guardar un arsenal de armas y municiones en su casa.
Y la de Álvarez, que ya pidió un trato justo en público para su feligrés durante la Misa del pasado domingo, no es la única voz que apoya al acusado de tenencia ilícita de armas ante la posibilidad de que resulte condenado a una pena elevada de cárcel. Vecinos del municipio de Cacabelos han iniciado una campaña de recogida de firmas de apoyo en los bares y otros establecimientos públicos de la localidad y otros pueblos del término municipal porque entienden que M.A.R.G, bautizado por los medios de comunicación con el sobrenombre de El Rambo de Quilós, no es un hombre peligroso y su aficción por las armas —en su vivienda, la Guardia Civil le intervino escopetas y fusiles de guerra como Cetme, Browing o Enfel, material explosivo y munición militar cuyo uso está prohibido para civiles— no puede ser castigada con una pena tan elevada.
«No defendemos el uso de las armas. Defendemos a la persona», explicó el sacerdote —que está dispuesto a declarar en el juicio— para pedir al tribunal que juzgará a M.A.R.G, que sea «benevolente».
El Ministerio Fiscal entiende que el acusado no puede alegar su condición de coleccionista de armas para justificar la tenenencia ilegal de un arsenal en su casa, inlcuyendo una cerbatana de un metro de largo provista de seis dardos, dos tiragonmas perfeccionados, dos bates de madera, ocho bayonetas, además de cuatro fusiles Cetme, una pistola Valtro, tres pistolas más y dos revólveres de imitación, así como distinta munición.
El acusado ha aparecido en varias grabaciones de You tube utilizando de forma simultánea algunas de las armas en un bosque sin identificar y el fiscal entiende que ha existido grave riesgo para la seguridad de las pesonas que pudiera pasar por la zona «por la dificultad de manejo conjunto de las mismas».
La acusación pública no ha apreciado que exista apología de la violencia fascista. La defensa ha solicitado la libre absolución argumentando que el acusado disponía de licencia de armas y era coleccionista.
El juicio comenzará a las 10.00 horas, el lunes en la Audiencia Provincial de León.