La alta morosidad obliga al Canal Bajo a pedir ayuda a la Diputación
La asamblea informó de un déficit presupuestario de 11.000 euros y 187.000 euros sin cobrar.
Un centenar de regantes participó ayer en la junta general celebrada en el salón de actos del instituto Virgen de la Encina. L. DE LA MATA
M. Macías / M. F. | Ponferrada
Los comuneros del Canal Bajo del Bierzo celebraron ayer domingo junta general ordinaria de socios y en ella se puso de manifiesto que existe una alta morosidad de los mismos. La entidad cuenta con 7.200 regantes y un número de ellos ha dejado de abonar a la comunidad parte de sus cuotas. Esto supone que no han entrado en las arcas del Canal Bajo un total 187.762,76 euros.
Esta situación ha desencadenado que desde la dirección se informe que acudirán a la Diputación de León para solicitar ayuda. En este sentido, la comunidad de regantes quiere firmar un convenio de colaboración con la institución provincial para intentar recuperar el cobro de ese dinero, que son pocas cantidades, pero que es difícil de saldar por la vía judicial. Por eso, esperan también la colaboración de los propios deudores en beneficio de toda la comunidad de regantes.
En el orden del día figuraba la aprobación de las cuentas del pasado ejercicio anual 2015. Así, la asamblea dio luz verde a los capítulos de ingresos y gastos. En el de ingresos se dio cuenta de una partida de 453.131,58 euros, frente a otra partida de gastos por importe de 464.736,90 euros.
Esto supone un déficit presupuestario de 11.605 euros. El capítulo de mayor coste económico fue el referido a los gastos de personal. En este caso el gasto ascendió en el 2015 a 123.000 euros.
Otro de los asuntos tratados fue la organización de los regadíos para el presente año 2016. En este sentido se abrirá el agua para regadío en el Canal Bajo del Bierzo desde finales del presente mes de abril.
En cuanto al precio de los regadíos, se mantiene en el mismo precio que ya estaba estipulado. De esta forma, los comuneros deberán pagar 134 euros por hectárea de regadío.
La comunidad está compuesta por los citados 7.200 comuneros. Ayer domingo en la junta acudieron más de un centenar de personas. Este colectivo es propietario de 3.600 hectáreas de regadío.
La asamblea contó con momentos de acaloramiento, dado que algunos comuneros expusieron cuestiones que se calificaron de temas particulares.