El Pleno aprueba una moción que declara a Cacabelos municipio laico
Los miembros de la Corporación no acudirán a actos religiosos representando al Ayuntamiento.
No habrá cambios en ninguna procesión. En la imagen, la de Pascua, una de las de más fervor. BARREDO
m. carro | ponferrada
Cacabelos es, desde el pasado miércoles, un municipio laico. La aprobación de una moción presentada al Pleno por el alcalde, el socialista Sergio Álvarez, ha establecido dicha consideración, lo que supone —según explicó el propio regidor— que la función pública de los representantes municipales queda totalmente desvinculada de cualquier acto religioso. Es decir, que si cualquiera de los miembros de la Corporación acude, por ejemplo, a una procesión, lo hará a título particular, como vecino de Cacabelos, y nunca en representación de la administración local o cualquiera de los grupos que la integran.
España ya es un Estado aconfesional, es decir, no está adscrito a ninguna confesión religiosa y existe libertad de creencias. Lo que el Ayuntamiento de Cacabelos ha estipulado con la aprobación de esta moción es que ni el alcalde ni cualquiera de los concejales, sea cual sea su color político, representarán a la administración en actos de corte religioso, una costumbre, hay que decir, muy arraigada en el Bierzo, donde los alcaldes suelen ser testigos de primera fila en procesiones y misas de relieve, fundamentalmente durante la celebración de determinadas festividades y en Semana Santa.
La moción, aprobada con los votos favorables de los siete concejales del tripartito —PSOE, IU y Alternativa Ciudadana de Cacabelos (ACC)— y el voto contrario de los seis ediles del PP ha levando ampollas entre los miembros de la Corporación. El portavoz del PP, Adolfo Canedo, fue el primero en pronunciarse sobre esta decisión, considerándola un «alarde de sectarismo, autoritarismo y despotismo ciego». Afirmación ni comprendida ni compartida con el alcalde, quien recordó que, en ningún caso, se está hablando de ateísmo ni prohibición alguna de culto, sino de laicidad. «No se está prohibiendo a nadie que acuda a actos religiosos, sino que se estipula simplemente que, si lo hace, lo hará a título particular», dijo Álvarez.
El regidor cacabelense quiso desmentir también las afirmaciones realizadas por Canedo en cuanto a lo que esto supondrá para Cacabelos. El popular aseguró que «con lo acordado en esta moción, desaparecerían fiestas tan tradicionales y de profundo fervor popular como el Lunes de Pascua, la Pascua en sí, San Lorenzo, San Isidro...». «Mentira —dijo el alcalde—. El señor Canedo miente como de costumbre. Ni se van a eliminar fiestas, ni procesiones, ni la Semana Santa ni se va a impedir el uso de espacios públicos para la realización de actos religiosos», quiso dejar claro el alcalde socialista de Cacabelos.