El PSOE acusa a Gloria Merayo de «mirar hacia otro lado» en la situación del colegio La Puebla
Ramón respalda que el criterio prioritario para asignar centros no sea el de cercanía.
dl | Ponferrada
El portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Ponferrada anunció ayer que elevará, en el próximo pleno que se celebre en el consistorio ponferradino, al equipo de gobierno de Gloria Férnadez Merayo para conocer la postura del ejecutivo popular en relación con la situación que atraviesa el colegio público La Puebla. Tres preguntas con las que los socialistas intentarían destapar la «política del avestruz», que preside la acción de gobierno de Merayo en relación con este tema, llegando a afearle su política de «mirar para otro lado».
Y es que para los socialistas, el gobierno ponferradino tiene mucho que decir y hacer en relación a la situación de un colegio que afecta a la comunidad de padres y alumnos de Ponferrada, por lo que «no se puede escudar en que la competencia es de la Junta de Castilla y León, por que sino no tendría sentido reclamar la salida de la autovía al Hospital porque tampoco es competencia del Ayuntamiento», apuntó Ramón.
Desde la bancada de la oposición socialista, contraria al cierre del colegio, sí se han puesto sobre la mesa posibles soluciones al problema del colegio La Puebla — paradigma de la no integración, al estar sólo matriculados alumnos de etnia gitana—, apuntando, en primer lugar a la posibilidad de se estudie que la proximidad del domicilio familiar al centro educativo no sea considerado un criterio prioritario a la hora de asignar plazas. «También que se acabe con los privilegios de la educación concertada», que a juicio de los socialistas, es un argumento más a favor de la discriminación, en este caso por motivo socioeconómicos.
Desde el grupo municipal socialista se ha apostado por la redistribución del alumnado de forma progresiva.