Toral de Merayo defiende el actual trazado del Camino de Invierno

j. c. f. | Ponferrada

Pidiendo respeto para el trazado original. Así respondieron ayer desde la pedanía ponferradina de Toral de Merayo ante las aspiraciones hechas públicas por el presidente de la Asociación Cultural Flores del Sil en Marcha, Ricardo Moura, para conseguir la modificación del trazado del Camino de Invierno a su paso por Ponferrada.

Desde la pedanía se considera que detrás de esta ambición de Flores del Sil únicamente se esconden intereses económicos —que los establecimientos comerciales de este barrio se vean beneficiados con el paso de peregrinos—, mientras que estiman ‘peregrinos’ los demás argumentos puestos sobre la mesa por ‘Flores del Sil en Marcha’. «Este señor dice que quieren que pase por Flores del Sil por motivos de seguridad para los peregrinos, ya que por las faldas del monte Pajariel es una zona despoblada y eso podría ser un peligro a la hora de pasar de noche. Pero que nos diga, ¿cuántos peregrinos ha visto este señor haciendo la ruta por la noche? Ninguno», la recriminan desde Toral de Merayo.

El pedáneo de esta localidad, Raúl García, además de compartir opinión con sus vecinos, asegura que «el camino por aquí, está muy bien señalizado, y si algo falta, podría ser un albergue para comenzar a aprovechar el potencial que puede tener en el futuro esta ruta a Compostela».

Desde la zona del Pajariel el Camino llega a Toral de Merayo, localidad a la que penetra a través de la zona conocida popularmente como ‘el Callejón’ — «donde se puede disfrutar con la contemplación de encinas centenarias», señala García —, y desde parte en dirección a Villalibre. Un recorrido «milenario y documentado», aseguran, que se contrapone con las aspiraciones de la asociación cultural de Flores del Sil. «Dicen que hay tradición peregrina en Flores. Que en la fachada de la iglesia tienen la concha o que la cofradía es la de Santiago, pero nunca pasó el camino por ahí».