Los juzgados hacen limpieza
El Decanato y el Servicio Común General destruirán el día 20 centenares de objetos sin dueño procedentes de causas judiciales cerradas en el primer expurgo masivo en Ponferrada
Mudanza al nuevo edificio de los juzgados de Ponferrada. ANA F. BARREDO
C. FIDALGO | PONFERRADA
Navajas oxidadas. Palos. Aperos de labranzada usdos como arma, hachas. Pero también alguna bicicleta, cedés y antiguas películas en VHS y en Beta, reproductores de compactos robados, sin ningún valor en el mercado. Son tres habitaciones llenas de objetos intervenidos por la Policía y por la Guardia Civil durante décadas —y con anterioridad al año 2000— sin ningún dueño conocido y que ante la imposibilidad de salir a subasta pública, una vez cerradas las causas judiciales de las que formaron parte, se someterán el próximo día 20 de junio al primer expurgo masivo —destrucción de efectos incautados— que tendrá lugar en el Palacio de Justicia de Ponferrada.
Décadas de actividad judicial dan para que los tres cuartos que se vaciarán el día 20 alberguen un pequeño museo del horror, con objetos de lo más variopintos usados en distintas agresiones, pero también, y en contraste, con una colección de películas en formatos trasnochados o de cedés de música que ya sólo cabrían el algún mercadillo callejero.
No es la función de los juzgados revisar —con todo el tiempo que supone— un material de escaso no ningún valor, que no encontrarían hueco ni siquiera en una subasta de bienes embargados y por eso se procederá al expurgo.
Antes de su destrucción —el Ministerio de Justicia ha contratado a una empresa especializada que garantiza su completa destrucción, según confirmaron fuentes judiciales— se procederá a la exhibición del material ante la prensa, y tanto la magistrada-juez decana de Ponferrada, Silvia Martínez Cantón, como el director del Servicio Común General de la nueva Oficina Judicial de Ponferrada, José Miguel Carbajosa, han convocado a los medios para mostrar los objetos antes de su eliminación. Se trata de la primera vez que los juzgados de Ponferrada llevarán a cabo un expurgo masivo para darles a las tres habitaciones donde se almacenan los objetos una nueva utilidad. Los juzgados sólo conservan objetos de este tipo, una vez cerradas las causas judiciales en las que sirvieron como prueba, durante 15 años.