Los juzgados expurgan el archivo de objetos sin dueño ante la falta de espacio
El nuevo edificio no ha resuelto las apreturas del almacén y se destruye lo descatalogado.
El expurgo de objetos permitirá a los juzgados de Ponferrada ganar espacio en los archivos. DE LA MATA
C. FIDALGO | PONFERRADA
Una nube de polvo acumulado durante tres décadas cubre la caja de Moonraker , la película de 1979 en la que James Bond viajaba literalmente al espacio y una de las centenares de cintas de videoclub en formato VHS, Betacam y DVD que se van a destruir estos días en los juzgados de Ponferrada porque forman parte de procesos judiciales posiblemente cerrados hace muchos años, están sin etiquetar y nadie las ha reclamado. Y junto a las películas, un par de bicicletas igual de polvorientas, equipos de música desfasados, altavoces mudos, cachabas, aperos de labranza y hasta una motosierra que posiblemente ni siquiera funcione; material de desguace sin ningún valor, imposible de sacar a subasta siquiera.
Es el contenido de algunas de las diez salas del archivo de los juzgados de Ponferrada que una empresa contratada por el Ministerio de Justicia se disponía ayer a destruir en el primer expurgo masivo de objetos procedentes de causas judiciales —todos anteriores al año 2001 y sin catalogar— para dejar espacio en el archivo y en cumplimiento de un acuerdo adoptado por el nuevo Servicio Común General de la Oficina Judicial de Ponferrada. Y es que el nuevo edificio judicial no ha resuelto el problema de la falta de espacio en el archivo de los juzgados de Ponferrada y hace falta liberar salas, reconoció ayer la jueza decana, Silvia Martínez Cantón, que junto con el responsable del Servicio Común General, José Miguel Carbajosa, dio a conocer ayer a la prensa los objetos a punto de ser destruidos y el procedimiento aprobado.
El expurgo iniciado con los objetos intervenidos por la Guardia Civil y la Policía Nacional y que con el tiempo han perdido su catalogación continuará próximamente con otros objetivos anteriores al año 2001 que aún estando adscritos a un expediente concreto, figuran en causas ya resueltas y en muchos casos relacionadas con delitos que ya han prescrito. Expurgarlos de otros expedientes cuyas intervenciones aún deben conservarse, sin embargo, será un trabajo minucioso, que requerirá de años, reconocía ayer Carbajosa frente a una hilera de cajas de películas incautadas donde sobresalía la imagen de Roger Moore vestido de astronauta.