MARÍA EUGENIA ALBA pRESIDENTA DE LA ASOCIACIÓN BERCIANA DE AGRICULTORES
«Tendría que ser obligatorio por ley modernizar los regadíos»
dl | Ponferrada
Uno de los sectores hacia los que se han vuelto todas las miradas como ‘salvavidas’ al que debe agarrarse la comarca del Bierzo para salir de la crisis económica, como es la agricultura, fue el centro del debate del último programa de La Tertulia antes del parón veraniego. La protagonista del mismo, organizado semanalmente por La 8 Bierzo y Diario de León fue la presidenta de la Asociación Berciana de Agricultores, María Eugenia Alba, quien no eludió ningún ‘charco’ para defender el presente y futuro del sector primario berciano.
«Me da pena que se hable de la agricultura desde la crisis. Ha estado ahí siempre, siendo el sustento desde hace años. ¿por qué antes se olvidaban que el sector primario lo necesitamos todos, al menos cinco veces al día?», lamenta al presidenta de la Asociación Berciana de Agricultores, Eugenia Alba, quien, acto seguido señala que la incorporación de los jóvenes al sector es uno de los asuntos considerados prioritarios en el plan de dinamización del sector agroalimentario de la comarca del Bierzo en el que se está trabajando en estos momentos de la mano de la Consejería de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León. «Lo que se tiene que provocar es un rejuvenecimiento del sector», señala Alba, para quien los responsables del desapego de los jóvenes hacia el campo berciano hay que buscarlos en el propio entorno familiar. «A los jóvenes les cuesta ver a la agricultura como una alternativa de futuro. Socialmente hay que ir cambiado. Yo siempre lo he dicho. Los principales culpables de que a nuestros jóvenes no les guste la agricultura hemos sido los padres, pues hasta hace unos años estaba muy mal visto».
Si la llegada de los jóvenes es el futuro del campo berciano, no lo es menos la modernización de los sistemas productivos, y entre ellos adquiere especial importancia la modernización del sistema de regadío. «Modernizar los regadíos no sólo es primordial, sino fundamental. Es el futuro de la comarca. Tendría que ser obligatorio por ley la modernización, pero no sólo aquí, sino en toda España», señala, mientras se apresta a puntualizar: «el gran riqueza del Bierzo es el agua».
Por eso no entiende cómo en su día se perdieran los 24 millones de euros destinados a la modernización del Canal Bajo del Bierzo, y, menos aún, que desde entonces «no se haya avanzado nada. El sector no se ha movido. No se ha llegado a ninguna administración, no se ha hecho nada y en Europa aún hay dinero para destinarlo al regadío. También en la consejería se nos ha informado de que hay dinero, pero que tiene que ser la comunidad de regantes la que vaya en serio a solicitar».
Mientras que en el Canal Bajo no se ha avanzado nada al respecto, las inversiones en el Canal Alto han permitido renovar la arteria principal. «Hemos tendido que hacer una importante inversión para instalar los ramales secundarios para llevar agua a las fincas, pero ahora es una maravilla», señala Alba, para quien sería preciso que, a la hora de acometer la futura modernización del Canal Bajo, que «se acometan a la vez la modernización de las vías primarias y las secundarias».
Otro de los aspectos a mejorar en el campo berciano es el minifundio existente. De cara a acortar los plazos de los procesos de concentración, Alba apuesta por «una reordenación de mutuo acuerdo entre los propietarios para evitar tantos papeleos, si bien la implicación de las administraciones sería necesario para acometer las obras en viales y acequias, por ejemplo».
Otro de los aspectos a mejorar en el agro berciano es el sistema de seguros. «Llevamos mucho tiempo luchando y seguiremos luchando. Por ejemplo la prima de manzana es altísima, es inasumible. Agroseguro nos tiene a la comarca en el riesgo más alto. Los seguros son caros y, aparte de eso, el problema está en que no se recoge la realidad de los kilos que produce una finca. No es rentable asegurar», apunta la presidenta de la Asociación Berciana de Agricultores.
Unos seguros para cubrir a los agricultores de unas contingencias climatológicas que este año no han sido excesivamente benévolas con los profesionales del campo bercianos. Un invierno suave y lluvia persistente durante la floración cuyos efectos se están haciendo palpables ya en los árboles. «En los árboles se ven bastantes menos piezas que en un año normal. Es pronto, hay que esperar a ver cómo desarrollan, la calidad está claro que será mejor que nunca al haber menos piezas, pero en el árbol hay pocos frutos», apunta Eugenia Alba, quien concreta que «aunque no todas las zonas están por igual, es cierto que la situación se ha complicado más en el caso de la manzana que la pera, y en especial entre los árboles jóvenes, más que en los de más edad».
Al margen de la climatología, las plagas son otro de los quebraderos de cabeza de los fruticultores, y entre estas, destaca el fuego bacteriano. «Que nadie se llame a engaño: no se va a erradicar del Bierzo nunca», se resigna la presidenta del ABA, quien lamenta que «nos ha cambiado la vida a los fruticultores. Te obliga a estar en la finca todos los días. A revisar los árboles todos los días, pues si hoy ves una rama afectada y no haces una poda sanitaria, mañana no tienes árbol». Psila del peral, avispilla del castaño o chancro — «hay una vacuna que sacó la Junta que experimentó con éxito en Las Médulas y Noceda pero que con la crisis se quedó ahí»— son algunos de los enemigos que acechan al campo berciano.
En cuanto a los lamentos, el sector agroalimentario de la comarca reconoce su déficit en transformación. «Es una buena opción, y en el caso de la castaña se transforma en Francia, y aquí se necesitaría una industria de transformación. En el caso de la manzana y la pera se investigan nuevas cosas. Es cierto que la producción que tenemos la vendemos en fresco y, a lo mejor, eso nos paraliza un poco para seguir avanzando por otras vías. Pero se podría trabajar en buscar nuevos hábitos... Todos vemos los snacks de frutos secos o también se han realizado experiencias con zumos».