La víctima afirma que dos hombres la llevaron ante su supuesto agresor
El juez decide prorrogar el plazo de detención del detenido e inspecciona la casa y la bodega.
DL | PONFERRADA
El vecino de Bembibre acusado de secuestrar y agredir a su expareja de Fabero pasó ayer a disposición judicial después de su detención el pasado martes en Castropodame. El titular del Juzgado número cinco, competente en casos de violencia de género, recibió la declaración del detenido y también de la víctima, que declaró como denunciante. También practicó las diligencias solicitadas por la fiscalía. En concreto, la entrada y registro en la casa y la bodega del detenido, y otras diligencias relacionadas con el dispositivo de control telemático. También, y a pesar de estar dentro del plazo de detención de 72 horas, el juez ha decidido prorrogar la detención del detenido para seguir practicando diligencias de investigación antes de resolver sobre su situación personal.
A primera hora de la tarde, I.R.G. de 35 años de edad, era escoltado por agentes de la Guardia Civil para comparecer ante el juez. El detenido, informó la abogada de la víctima, había pedido someterse a un análisis del médico forense para demostrar que no había en su cuerpo ningún rastro de la mujer.
La denunciante aseguró a su salida de los juzgados, donde se sometió a una revisión del médico forense, que dos hombres que no ha podido identificar la asaltaron al salir de su casa de Fabero para pasear a su perro y la llevaron en un coche, con una venda en los ojos, hasta el trastero de Bembibre donde aguardaba su ex pareja para consumar las vejaciones; golpes en distintas partes del cuerpo y la aplicación de pegamento en la vagina que le causó quemaduras, según el parte médico. La mujer afirmó que su presunto maltratador siempre usó guantes y ella no pudo tocarle en ningún momento porque estaba maniatada.
La víctima manifestó a los periodistas que los dos hombres que la habrían secuestrado en Fabero la abandonaron finalmente abandonada en una casa vacía del barrio de La Estación, a pesar de que su ex pareja les habría pedido que la dejaran en las vías del tren.
Emilia Esteban, la letrada de la víctima anunció además que tiene previsto solicitar al juez una orden de protección también para el hijo de 12 años de la mujer de Fabero, a quién el presunto maltratador habría hecho extensivas sus amenazas.
La letrada volvió a lamentar el «error» de dejar libre al acusado de malos tratos tras la vista ante el juez del pasado lunes, horas antes de que se produjera el secuestro, y recordó que tanto ella como el Ministerio Fiscal había pedido prisión para la ex pareja de la víctima por un nuevo quebrantamiento de la orden de alejamiento. El acusado había dejado la cárcel, de nuevo en libertad provisional, el pasado viernes 14, y a la espera de juicio después de las denuncias por malos tratos que, primero un testigo, y después la propia mujer, formularon el otoño pasado.