Comienza el apogeo de las castañas con precios de hasta 1€ de diferencia por kilo

m. c. | ponferrada

Si bien en algunas zonas del Bierzo hace ya una semana que empezaron a caer las primeras castañas, el fin de semana que acaba de terminar ha abierto la campaña de recogida de forma generalizada en la comarca, ayudado también por las lluvias registradas, principalmente en la jornada de ayer, que han favorecido el desprendimiento de los erizos. Comienza, por tanto, el grueso de una campaña que llega con dos semanas de retraso y en la que los precios se mantendrán en márgenes similares a los de 2015, quizás un poco por encima, pero lejos del ‘boom’ experimentado en 2014, cuando la incidencia de la avispilla en países como Italia y Francia multiplicó el valor del producto berciano hasta un 20%. Ahora mismo, el precio varía mucho en función de la zona productora y del calibre del fruto y puede oscilar entre el euro y los dos euros, según las fuentes consultadas.

Hay que recordar también que es precisamente cuando arranca la recogida cuando el precio es mayor, reduciéndose después a medida que avanza la campaña. En todo caso, en zonas como la de Sobrado, en el Bierzo Oeste, hace ya más de una semana que se inició la recogida de la variedad courelá, de gran calibre, y se está pagando hasta dos euros por kilo. En otra zona de gran producción, en el municipio de Trabadelo, la caída comenzó hace tan sólo unos días y las primeras castañas que se han vendido han sido pagadas a 1,20 o 1,30 euros el kilo. «Más o menos como el año pasado», afirmó su alcalde, Ricardo Fernández, considerándolo «un precio aceptable».

En el entorno de Las Médulas y hasta Puente de Domingo Flórez se está pagando desde 1,30 hasta 1,70 euros por kilo. En todo caso, las de mayor valor son variedades de buen calibre y el precio final depende mucho del comprador, ya que hay bastante competencia. Por contra, en el Alto Sil, el kilo de castaña se está pagando a un euro. No obstante, en esta zona la caída llega más tarde que en el Bierzo Oeste o Central y el precio que ahora obtiene el productor por kilo vendido puede variar en función del calibre y de la cantidad. Y es que el precio de la castaña depende de muchos factores, ya no sólo morfológicos, sino también de evolución del mercado y de la oferta y la demanda.

Precisamente, en cuanto a las características de la castaña de la presente campaña, en la zona de Trabadelo reconocen que las primeras han sido «bastante pequeñas» pero confían en que el calibre sea el «normal» ahora que empieza a caer la mayoría del fruto. En Sobrado, por contra, el tamaño del fruto es más que bueno pero la cantidad se ha reducido —aseguró su alcalde, Constantino Valle— hasta un cuarenta por ciento por la ausencia de lluvias durante el período de floración de los castaños.