«Si no se interviene pronto en La Placa se perderá para siempre»

c. fidalgo| ponferrada

«Lo más importante que he hecho en mi vida es la docencia», decía ayer Vicente Fernández para hacer balance de toda una trayectoria dedicada a la investigación, pero sobre todo a la enseñanza, primero en León y en Vizcaya, y durante 25 años en el instituto Gil y Carrasco de Ponferrada. Conocido por su faceta como historiador y autor de voluminosas investigaciones sobre el patrimonio berciano, en el momento de hacer memoria, Fernández se acordaba ayer, por encima de todo, de las personas; de historiadores como José Antonio Balboa y Miguel Jota García, compañeros en una labor que hasta ahora nunca había sido reconocida, y sobre todo se acordaba de sus alumnos, porque trabajar con los jóvenes, «educar ciudadanos que vivan libremente y con criterio» ha sido, insiste ahora que está jubilado, lo más grande de su vida. Y frente a los que critican a las nuevas generaciones frente a las anteriores hace autocrítica. «Quizá los que fallamos seamos nosotros. La sociedad no les está dando lo que demandan».

Nacido en Cacabelos en 1951, miembro del equipo directivo del Instituto de Estudios Bercianos, Vicente Fernández tampoco se olvidaba ayer de la otra faceta de su vida y lamentaba especialmente el estado en el que se encuentran dos lugares de Ponferrada que merecían mejor suerte. En primer lugar, los vestigios del pasado industrial sobre los que aún no se actuado, en especial el intercambiadro de La Placa. «Si no se interviene pronto se perderá para siempre», advierte. Y de la situación de la histórica calle del Rañadero también opinaba ayer que «es un deshonor para Ponferrada» que se encuentre en la situación de abandono actual. «Es una vía muy transitada, con muchas posibilidades y espero que llegue pronto el día que tenga solución». El premio de ayer le ha llegado a Vicente Fernández a punto de hacer las maletas para presentar en la Feria Internacional del Libro de la ciudad mexicana de Guadalajara su investigación sobre el empresario Antonio Estévez.