Las Médulas quiere extender a Tres Minas su reconocimiento universal
El director de Patrimonio destaca la complementariedad de los dos yacimientos auríferos
j. c. f. | Carucedo
El director general de Patrimonio de la Junta de Castilla y León, Enrique Sáiz, ejerció ayer de cicerone de los representantes portugueses de la zona de Tres Minas —el presidente de la Cámara de Vila Pouça de Aguiar, Alberto Machado y el director regional de Cultura del Norte, Antonio Ponte— en la visita de éstos al paraje berciano Patrimonio de la Humanidad. Precisamente Sáiz se refirió a este reconocimiento universal de la Unesco adelantando la intención de ambos territorios por ampliar este reconocimiento a la zona portuguesa. En este sentido, el director general rechazó que con esta extensión a la zona de Tres Minas, Las Médulas pongan en peligro algo de su potencial como atracción de visitantes, más bien al contrario. «El hecho de que haya un bien cultural que trasciende las fronteras es un valor que hoy está puesto al alza por la Unesco cuando habla de patrimonio mundial. Reforzaría el carácter universal de Las Médulas, pero también incrementaría, estoy seguro, el número de visitantes porque hay un mayor número de recursos atractivos, sino porque la misma idea de la trasnacionalidad, del rompimiento de la frontera a través de la Cultura y la arqueología, como es este caso, es muy interesante para muchas personas de todo el mundo», explicó el director general de Patrimonio de la Junta.
En cuanto a los plazos para que esta aspiración se pueda llegar a materializar, tanto Sáiz como los representantes de Tres Minas, apuntan a que la respuesta de la Unesco podría producirse en un plazo de «dos o tres años», recordando que este proceso de adición a un espacio que ya goza de la declaración de Patrimonio de la Humanidad es más liviano que lo que fue la declaración de Las Médulas, hace ahora dos décadas, partiendo desde cero.
Más allá de la decisión final de la Unesco, lo que está decidido por las dos zonas que albergan estos vestigios extractivos de la época de los romanos es establecer lazos de cooperación. «Si técnicamente no fuera posible esa ampliación, seguiríamos trabajando en conjunto, porque pensamos que la estrategia de la unión de estas dos zonas va a ser muy beneficiosa», señaló Sáiz, quien relacionó ventajas «desde el punto de vista científico, patrimonio cultural y turístico». De hecho, el director general de Patrimonio recordó que en el ámbito científico, ya hay camino andado, no en vano el investigador Javier Sánchez Palencia ha dirigido trabajos en ambos yacimientos.
Otros ámbitos en los que se podría fijar esta colaboración serían el de la promoción conjunta o la puesta en común de modelos de gestión — «un tema, éste, siempre complejo y no exento de polémica», recordó Sáiz—.
Una colaboración que quedará plasmada en un convenio que, tras dotarlo de contenido, es previsión de la Dirección General de Patrimonio que se firme antes de que concluya el presente año. De hecho, este estrechamiento de lazos entre estas dos regiones se materializará este mismo ejercicio cuando una representación de la zona del norte de Portugal, participe en la jornada de gestión de paisajes culturales que se desarrollará a finales de 2017 para cerrar el vigésimo aniversario de la declaración de Las Médulas como Patrimonio de la Humanidad.