un cuarto de siglo procesional
El regalo de Tremiñá a los 25 años
El escultor, autor del principal paso de Semana Santa de Ponferrada, la Última Cena, abre una exposición de su trabajo en el Museo del Bierzo y entrega al Museo de las Cofradías la maqueta original de la obra.
Autoridades, cofrades y artista, ayer en el Museo del Bierzo junto a las esculturas del paso de la Santa Cena. ANA F. BARREDO
dl | Ponferrada
Entrar estos días el Museo del Bierzo impone. Las tallas de 2,16 metros que integran el paso procesional de la Santa Cena de Ponferrada acaparan la atención al visitante. Se trata de una de las obras maestras del escultor valdeorrés Xelo de Tremiñá, que con su trabajo realizado y estrenado hace ahora 25 años, ha dado a la capital berciana el paso procesional más llamativo por su monumentalidad de la Semana Santa berciana.
Ayer, se abría esta muestra en el Museo del Bierzo y los apóstoles que aparecen sentados en el paso procesional, junto a un imponente Jesucristo erguido, fueron desmontados y colocados bajo el tragaluz del centro museístico.
En el acto se desveló que Xelo de Tremiñá ha regalado a la ciudad, a la Cofradía Jesús Nazareno —que fue la que encargó hace ahora un cuarto de siglo la obra— la maqueta en la que se basó todo el trabajo escultórico. Curuiosamente, en la maqueta el Jesucristo aparece sentado a la mesa de la última Cena, y en el paso procesional, finalmente fue esculpido de pie.
Los 25 años son una fecha histórica desde la bendición de este paso procesional, decía ayer el presidente de la Hermandad, Marcos Morala, quien era el encargado de anunciar la donación hecha por Tremiñá y que será expuesta para el visitante el Museo de las Cofradías de Ponferrada.
Agradeciendo esta donación por parte del Ayuntamiento se encontraba la concejala María Antonia Gancedo, quien incidía en la importancia de la fiesta señalada de la Semana Santa, como algo enriquecedor para la tradición religiosa y el turismo.