La alcaldesa afirma que lleva tiempo esperando reunirse con los vecinos de Compostilla

dl | ponferrada

Mientras que los vecinos de Compostilla reclaman más atención por parte de la alcaldesa de Ponferrada por el estado lamentable en el que se encuentran las calles del barrio y ante el retraso en el inicio del prometido plan de rehabilitación urbana, Gloria Fernández Merayo se lava las manos y afirma que lo que está esperando es a que la asociación vecinal se reúna con el Ayuntamiento para exponer las deficiencias que llevan denunciando públicamente varios meses.

Una afirmación que se contrapone claramente a la realizada por dicho colectivo, que recuerda haberse reunido con ella el pasado mes de marzo sin que los acuerdos alcanzados en dicho encuentro hayan fructificado en algo. «He pedido una reunión hace tiempo con los vecinos de Compostilla para que nos digan ellos cuáles son las necesidades que detectan en el barrio», dijo ayer Fernández Merayo, informando a un tiempo de que la próxima semana vendrá a Ponferrada el director general de Vivienda y Urbanismo, Ángel Marinero, con los técnicos de la Junta «para concretar las actuaciones».

Dice ahora la alcaldesa que la aportación de los vecinos es necesaria porque «los propietarios nos tienen que decir qué parte de su vivienda van a arreglar».