El Consejo Comarcal abre la puerta a limitar el acceso a Las Médulas

j. c. f. | Carracedelo

«Tras veinte años de la declaración del paraje de Las Médulas, no puede ser que la situación sea ésta». Volvió a insistir en el día de ayer el presidente del Consejo Comarcal del Bierzo, Gerardo Álvarez Courel, a la hora de evaluar la situación que se ha planteado en la vieja mina de oro romana en el último fin de semana. Un lamento acompañado con una petición de acciones concretas para lograr «encontrar una solución en los momentos en los que se producen aglomeraciones como las de este pasado puente de Semana Santa, para que el paraje pueda absorber esa afluencia de visitantes».

Para ello, desde el Consejo no se cierran las puertas a nada. Ni tan siquiera a poner sobre la mesa la posibilidad de limitar el acceso de visitantes al paraje, y de hecho, el propio Courel se refirió a la situación que en su día se planteó con Altamira donde se ha limitado el acceso de personas a la cueva. «No sé si deben ser, mil, quinientos o cinco mil, pero si se tiene que hacer y limitar el acceso, se tendrá que limitar», apuntó Álvarez Courel, para quien la solución no sería tanto «poner puertas al campo, como regular las entradas por todos los accesos».

Y es que según el presidente del Consejo Comarcal, la situación actual no está permitiendo sacar todo el provecho posible al potencial que presentan Las Médulas. «El paraje está ofreciendo en la actualidad un turismo que no es un turismo de calidad, ni para los visitantes ni para los habitantes de la zona».

En cuanto a las responsabilidades de la actual situación, desde el Consejo se tiene claro que el que tiene que coger ‘el toro por los cuernos’ es el director general de Patrimonio, «que para eso es el presidente de la Fundación», pues a su juicio, «el Consejo tiene bastante con mantener lo que tiene», a la vez que defendía que «esto no es una guerra entre el PP y el PSOE, sino del Consejo en defensa de los intereses de los bercianos» —en referencia a las afirmaciones de Enrique Saiz sobre la prioridad dada por el Consejo y el Gobierno Zapatero a la construcción de la Domus en lugar de un intercambiador—. En este sentido, Courel le quiso recordar a Saiz que el citado intercambiador no se ubicaba en el espacio de la Domus en el plan de la Junta sino en la Casa del Parque.