La iglesia del monasterio necesita una restauración
El Monasterio de San Pedro de Montes, donde este verano volverá a excavar el equipo de la Tebaida en busca de restos arqueológicos, todavía tiene pendiente una restauración de su iglesia, la parte del cenobio mejor conservada y todavía en uso, pero no por ello la menos necesitada de una inversión. Lo recordaba ayer Antolín de Cela. El templo necesita fondos para acometer la recuperación de sus tres retablos de madera, para resolver los problemas estructurales en la bóveda y en el transepto, donde se han detectado dilataciones preocupantes, y para dotarle de iluminación correcta. Las necesidades no acaban ahí, porque sería necesario estudiar las policromías que asoman en las paredes, por si tuvieran interés artístico e histórico, y sobre todo, recuperar la sacristía y los cinco cuadros del siglo XVI, de la escuela de Oviedo.
«Hay que actuar en el pasado y en el presente. Es importante mirar hacia el pasado, pero es el presente lo que le da vida al valle», decía ayer para que las administraciones que financian las excavaciones no se olviden de restaurar la iglesia.