Carucedo llama al diálogo para buscar una salida al malestar en Las Médulas
El alcalde se hace eco de las quejas de turistas por las restricciones de tráfico al paraje y pide a las administraciones que les escuchen para cambiar detalles del Plan Intermédulas.
Los Ayuntamientos de Carucedo y Borrenes tienen la impresión de que descendieron mucho las visitas turísticas. L. DE LA MATA
M. Félix | Ponferrada
El alcalde de Carucedo, el socialista Alfonso Fernández, hizo ayer una llamada a la cordura y al diálogo de todas las partes implicadas en la gestión del paraje arqueológico de Las Médulas para tratar de rebajar el malestar y la tensión vivida en estos días de la pasada Semana Santa ante el plan de movilidad Intermédulas, que aplicaba restricciones turísticas de acceso. Fernández lo tiene claro y considera que lo que comenzó como un plan piloto que debería de ir perfilandose o mejorándose, se ha convertido en un problema, tal como le comentan los vecinos que gobierna desde el Ayuntamiento, especialmente del sector hostelero y también las juntas vecinales de los pueblos.
El pasado fin de semana, después de que el alcalde de Borrenes, el popular Eduardo Prada, presentase una denuncia en la Guardia Civil contra la Fundación Las Médulas por considerar que no tiene licencia municipal para usar el aparcamiento de Orellán, ni colocar paradas de autobús en el este pueblo, se puso en contacto con su homólogo de Carucedo. Hablaron y los dos coincidieron en que es necesario abordar una solución al problema, dado que consideran que los vecinos de ambos municipios son los más perjudicados.
Para mañana martes también está previsto una reunión en Carucedo con hosteleros de la zona, dado que han experimentado pérdidas importantes por la baja afluencia turística, que no solo achacan al mal tiempo, sino más bien a los cortes de tráfico en Carucedo.
«Tenemos que buscar solución. No nos escuchan quienes han organizado esto y los que vivimos aquí son los que tienen el problema, no los que organizan este plan de movilidad desde fuera, sin ver los perjuicios que están causando. Tienen que escucharnos», decía ayer el regidor de Carucedo. Alfonso Fernández dudaba de la legalidad de los controles y cobros que se han aplicado frente a la Dumus de Carucedo, con el pago de 5 euros por persona. Cuenta que hubo turistas que lleveban días en Médulas y se vieron ofendidos por tener que demostrar lo como si fuera una frontera.