Diario de León

Cortada la carretera de Peñalba tras un nuevo desprendimiento causado por la tormenta

El aluvión de lodo y agua no causó daños a ningún conductor, pero una familia de tres miembros tuvo que salvar a pie el lugar del derrumbamiento.

Detalle del estado de la carretera

Detalle del estado de la carretera

Ponferrada

Creado:

Actualizado:

Una fuerte tormenta de granizo ha provocado el enésimo desprendimiento sobre la carretera LE-5238 que une Ponferrada con la localidad turística de Peñalba de Santiago, que permanece bloqueada desde las cinco y media de la tarde. El aluvión de lodo y agua no causó daños a ningún conductor, pero una familia de tres miembros tuvo que salvar a pie el lugar del derrumbamiento. La pedánea de Peñalba, Susana Rodríguez, ha vuelto a reclamar medidas para evitar nuevos desprendimientos. El derrumbe se produce el mismo día en que la Diputación ha anunciado que la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de Ponferrada colaborarán con la institución provincial para desarrollar un proyecto que de una solución definitiva a la inestabilidad del terreno, en una zona donde el incendio de la primavera de 2017 ha dejado afectados a los suelos.

Precisamente, la Diputación de León y la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, con la colaboración del Ayuntamiento de Ponferrada, acordaron poner en marcha un proyecto conjunto que solucione definitivamente los problemas que sufre la LE-5238, que es la única carretera de acceso a la localidad de Peñalba de Santiago.

El pasado verano, en el mes de agosto, hubo fuertes lluvias en las proximidades de la localidad, que provocaron grandes desprendimientos de tierra y piedras provenientes de la ladera de la montaña, y arrastres de material suelto que se depositaron sobre la calzada, por lo que los vehículos no podían circular. Estos arrastres se produjeron en una longitud de 140 metros, con alturas de material depositado sobre la calzada de hasta cuatro metros.

Para dar una salida a las personas, tanto residentes como visitantes, que resultaron aisladas en la localidad de Peñalba, fue necesario acondicionar una pista en tierra de siete kilómetros de longitud, que discurre entre las localidades de San Cristóbal de Valdueza y Peñalba de Santiago que a día de hoy no existe, ya que ha sido arrastrada por las lluvias y tomentas.

Además, en noviembre del pasado año, la institución provincial encargó un estudio a una empresa experta en geología, con el objetivo de determinar los trabajos necesarios para poner fin a estos desprendimientos. Sin embargo, las fuertes lluvias y tormentas consecutivas producidas en las últimas fechas han provocado cortes, daños y un mayor movimiento de tierras, tanto en la carretera que pertenece a la Diputación de Valle del Oza, como en la pista que une San Cristóbal de Valdueza y Peñalba de Santiago.

La Diputación ha acometido la limpieza de los daños ocasionados por estos desprendimientos en la carretera, así como ha encargado, con carácter de urgencia, la actualización ampliada del estudio geológico que se había encargado en noviembre, para determinar los trabajos y el coste que supondrían las actuaciones, para dar definitivamente una solución a estos desprendimientos.

Además, ha mantenido varias reuniones con la Consejería de Fomento para conseguir llegar a esta solución. Fruto de la última de estas reuniones celebrada ayer entre el presidente de la Diputación, Juan Martínez Majo, el Consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suarez-Quiñones y el diputado provincial de fomento, Ángel Calvo, se acordó la colaboración entre ambas instituciones para poner en marcha la actuación necesaria y desarrollar el proyecto que termine con los problemas que generan las lluvias en la carretera de Peñalba.

 

 

tracking