Así se llevó al único berciano enterrado en el Valle de los Caídos

manuel c. cachafeiro | ponferrada

Poco se sabe de Ildefonso Álvarez Díez, el único berciano del que se tiene constancia que está enterrado en el Valle de los Caídos. En Torre del Bierzo, su pueblo, nadie lo recuerda. «Ha pasado mucha gente por aquí. En las minas trabajaron miles de personas», comentan en un bar de la antigua localidad minera.

Parte de defunción y documento donde se cita el nombre de Ildefonso Álvarez entre la veintena de traslados desde la provincia. EFE.

Ildefonso Álvarez Díez figura en el listado de 20 personas que fueron trasladadas al monumento franquista en 1959, el año de su inauguración, dos décadas después del final de la Guerra Civil. Todos fueron trasladados como «héroes», con el consentimiento de la familia —aunque en el caso de Ilfefonso no consta en la documentación—, después de ser exhumados de los cementerios de Astorga, Boñar, Valdelugueros, La Uña, Sabero, León y Torre, el único municipio berciano de la lista.

Según el acta de defunción, Ildefonso Álvarez Díez, casado y de profesión soldador, falleció el 20 de septiembre de 1938 en el kilómetro 225,533 de la vía del tren a su paso por Torre. La hora, las 20:00 horas. La causa, una «hemorragia cerebral traumática» certificada por un facultativo. No consta que fuese una muerte violenta. Ni tampoco que no lo fuera. Murió con 30 años, según el mismo parte.

De su exhumación, practicada el 25 de marzo de 1959, seis días antes de que se inaugurase el Valle de los Caídos oficialmente, se da cuenta en el margen derecho de la hoja de su defunción, sin firma alguna de la familia. Sólo las del juez de paz y el secretario de aquel momento, aunque se informa de su destino. Sus restos fueron exhumados, se dice, «en virtud de orden de la superioridad» y recogidos para su traslado hasta Madrid por el capitán de la Guardia Civil del Subsector de Astorga Valentín González.

Exterior del Valle de los Caídos. EFE.

En la carpeta del Ministerio de Gobernación que conserva la documentación del traslado de los 20 leoneses del bando nacional no hay más referencias a este berciano, salvo la comunicación firmada por el entonces gobernador civil con el listado completo de sus nombres y apellidos a los pocos días de llevar los restos a San Lorenzo del Escorial. El documento tiene como destino el subsecretario de la Gobernación.

En el Valle de los Caídos yacen los restos mortales de 33.833 personas que fueron llevados desde toda España a partir del año 1959 en 491 envíos. De ellos, 21.423 están identificados y 12.410 son de desconocidos, según explica el Ministerio de Justicia en su página web, donde desde 2011 se publica un listado con todos los nombres, aunque en el caso de la provincia de León no aparece el de Ildefonso Álvarez Díez, que sí está confirmado que yace en el Valle de los Caídos por su acta de defunción.

Por Decreto-Ley de 23 de agosto de 1957 se creó la Fundación de la Santa Cruz del Valle de los Caídos y se constituyó una comisión para estudiar los traslados. Sin embargo, durante el franquismo no se hicieron públicos los nombres. De Ildefonso no se tiene información de cuáles fueron las motivaciones para su traslado.

El 28 de agosto de 1960 tuvo lugar un gran acto en la basílica para honrar a los caídos leoneses. Encabezado por el obispo Luis Almarcha y el entonces gobernador, Antonio Álvarez Rementería, en él participaron más de 2.000 personas que se trasladaron en autobuses desde diferentes puntos de la provincia. Hubo un responso, coronas de flores... un gran boato según recogió la prensa de la época, pero ninguna referencia a quienes estaban enterrados allí, ni siquiera a los del bando nacional que habían sido trasladados como «héroes».

«Nadie sabe, pero puede que tenga familia, aunque ya no viva aquí», comentan en Torre del Bierzo sobre Ildefonso Álvarez Díez, de nuevo de actualidad por la polémica que rodea la salida de Francisco Franco del Valle de los Caídos. Él lleva allí casi 60 años desde su exhumación en Torre.