Acuerdo para no llegar a juicio en los despidos de Masa Galicia
A los primeros cuatro casos de ayer se sumarán otros tres el día 27.
Protesta ante las oficinas de Gas Natural en Ponferrada de los trabajadores de Masa Galicia. DE LA MATA
m.c. cachafeiro | ponferrada
Los primeros cuatro juicios de trabajadores de Masa Galicia, la principal subcontrata de la central térmica de Anllares, no se celebraron ayer en los Juzgados de Ponferrada al alcanzar ambas partes un acuerdo ‘in extremis’ que supone un incremento en la indemnización.
Aunque Masa Galicia y la matriz de la térmica, Gas Natural, habían rechazado un acuerdo en el acto de conciliación previo hace unas semanas, ayer cambiaron de actitud, lo que el representante de Comisiones Obreras, José Crespo, calificó como un punto de inflexión en el conflicto que dura ya varios meses. Además de los cuatro juicios de ayer en el Juzgado de lo Social de la capital del Bierzo, para el próximo día 27 están previstos otros tres en los que Crespo entiende que se llegará al mismo acuerdo. «Desconozco el acuerdo económico al que se ha llegado (por ayer) pero es un hecho satisfactorio después de tantos meses de conflicto», explicó este representante sindical en declaraciones a este periódico. Para los 12 trabajadores que quedan en la central de Anllares, el Comité de Empresa de Masa Galicia exige que se mantengan los puestos de trabajo con el fin de alargar su vida laboral. «Si muchos de nosotros trabajamos en el montaje de la térmica, allá por los 80, por qué ahora no podemos trabajar en su desmantelamiento», se preguntó.
El pasado mes de agosto, el BOE publicó la resolución de la Dirección General de Biodiversidad y Calidad Ambiental en el Boletín Oficial del Estado. El desmantelamiento de Anllares estaba anunciado desde que la central comunicó, en el año 2013, su imposibilidad para cumplir con los límites marcados por Europa al no disponer de infraestructuras que reduzcan los óxidos de azufre y de nitrógeno de las emisiones.
Tras acogerse a un plan de cierre, los propietarios —Naturgy, la antigua Gas Natural Fenosa, que dispone de dos tercios de la propiedad y Endesa, que dispone del tercio restante— solicitaron en mayo del año pasado el «cese paulatino de actividad».